El senador de Podemos ha anunciado una comparecencia pública a las 13 horas para tratar de explicar si especuló o no con un piso de VPO.
Eldiario.es apunta que, según fuentes de Podemos, lo que habría ocurrido es que Espinar vendió el piso al constatar que no podía pagarlo.
Empieza por admitir que "es así: compré y vendí un piso".
El de Podemos explica que hizo unas primeras aportaciones cuando la vivienda aún estaba en construcción. "La escritura de compra se ejecuta en 2010", explica
Según Espinar él pensaba que "al acabar mi carrera" tendría un trabajo para poder pagar el piso.
Dice que "no es una VPO", que es una "Vivienda Joven de la Comunidad de Madrid".
Sin embargo, aunque no es una VPO dice que "es una vivienda pública".
"La razón de la venta del piso tiene que ver con que al recibir la venta del piso yo tenía una beca y mi trabajo no me permitía pagarlo".
"Lo vendí al precio que fijaba la Comunidad de Madrid", dice, "no es cierto que gané 30.000 euros, explicando que pagó el IVA y tenía "ciertos gastos" habituales en la compra de vivienda.
Espinar explica que ganó unos 19.000 euros y que parte de ese dinero lo dedicó a "pagar la matrícula de mi master y comprar un ordenador personal".
"Me consta que tenían la información hace tiempo", dice Espinar, que denuncia intereses sucios.
Espinar trata de aparecer como víctima: "Esto le ha pasado a mucha gente en este país, que ha comprado un piso y luego no podía pagarlo".
Por el momento Espinar no ha explicado de dónde sacó el dinero siendo estudiante para comprar aquel piso. "Estoy muy golpeado".
"Hemos intentado que nos de explicaciones desde hace varias semanas y no lo hemos logrado", le dice.
"El origen del dinero es un préstamo familiar", dice Espinar, que no recuerda "las cantidades exactas.
"Sí, considero que la venta de un piso al precio que te obligan a vender" es lo correcto.
"El dinero me lo prestó mi madre, mi padre y mi abuela".
"Lo que yo hice ante la Comunidad de Madrid es demostrar que no tenía ingresos y no podía pagar el piso".
"Creo recordar que pedí una ayuda, pero lo tendría que confirmar".
Dice que ha informado a la Ejecutiva de su partido y que "creo que entienden que las explicaciones son suficientes".
Admite que le explicó el asunto a Pablo Iglesias aunque dice que "no le veo importancia".
"Mi abuela con sus ahorros, mi madre con sus ahorros y su trabajo y mi padre con sus ahorros y su trabajo" le prestaron "unos 60.000 euros".
"60.000 euros son una cantidad muy normal que a muchos chavales les han prestado sus familias".
"Me inscribo en el programa de Vivienda Joven de la Comunidad de Madrid", explica Espinar.
Le preguntan a Espinar si hubiese aceptado el préstamo de su padre si tuviese la información sobre él que tiene ahora. "No voy a valorar eso", escurre el bulto.
"Hay algunas cosas que joder", explica Espinar para decir que "claro" que habló con tu familia de la compra.
"Quién ha sacado esta información no quiere que yo sea secretario general de Podemos en la Comunidad de Madrid", dice, pero según él no ha partido de unos compañeros de los que ha "recibido calor y cariño".
Tenía el ordenador "hecho una pena".
"Esto duele, hacer ese tipo de comparaciones hace daño". Un Espinar indignado le lee la cartilla a la periodista.
"Yo vendí al precio que me dejaba la Comunidad de Madrid", dice Espinar, que admite que no sabe si el vendedor puede vender a un precio menor.
Espinar acaba su rueda de prensa tras un largo turno de preguntas que ha dejado muchas dudas abiertas y una constatación: se lucró con la venta de un piso.
Sus compañeros en Podemos han defendido a Espinar sin fisuras, como Irene Montero que tirando de argumentario ha hablado de la la "máquina del fango" puesta en marcha contra el senador.
La eurodiputada del PSOE ha marcado distancia respecto a la actuación del podemita, aunque no ha querido se muy dura en declaraciones a La Sexta ha dicho respecto de las explicaciones de Espinar que "todo es muy confuso".
"Son muchas explicaciones las que creo se tienen que dar y pocas las explicaciones recibidas", se ha quejado el senador socialista David Lucas, también alcalde de Móstoles.
"La verdad, no me parece una nueva política; más bien parece lo de siempre, vieja política", ha reflexionado el dirigente de Ciudadanos Ignacio Aguado.
Con el hashtag #MaquinadelFango, dirigentes de Podemos han intentado la difícil misión de salvar la cara de Espinar y señalar al mensajero. "Que Prisa no sueñe con dirigir Podemos", dice Miguel Urbán.
Lo primero siempre: claridad y responsabilidad. Y aunque PRISA dirija el PSOE, que no sueñe con influir en PODEMOS. #MaquinadelFango
— Miguel Urbán Crespo (@MiguelUrban) November 2, 2016
Sin embargo, la marejada no deja de crecer en Twitter: cientos de usuarios están atacando a los podemitas que salen en defensa de Espinar.
No permitiremos que los que mantienen a Rajoy en la Moncloa nos digan quién puede y quién no puede ser nuestro SG en Madrid #MáquinaDelFango
— Carolina Bescansa (@CBescansa) November 2, 2016
Más allá de las explicaciones técnicas sobre la compra venta de VPO, los internautas están haciendo cuentas sobre el máster y el ordenador que, según Espinar, se compró con la plusvalía. Las mofas no se han hecho esperar.
Aquí el portátil que se compró Ramón Espinar para estudiar el máster. pic.twitter.com/AFaYFFtXqU
— ErPali (@beticorro1) November 2, 2016
En un comunicado, los populares del Senado han tachado de "hipócrita" al senador podemita. Dicen que vende una "imagen de ejemplaridad y moralidad" cuando se dedica a sacar un "jugoso beneficio" con una vivienda protegida.
Pocos han quedado conformes tras las explicaciones de Espinar sobre su operación urbanística. La hipoteca concedida a un estudiante aún sin trabajo, la concesión discrecional de la vivienda... Muchos tuiteros siguen teniendo dudas.
La hipoteca de Ramón Espinar era una subprime de libro, ganaba 480 y pagaba 580. ¿Con que aval se la dieron?.
— César (@cesar_ag5) November 2, 2016
Iglesias y el propio Espinar han retuiteado un comentario que está levantando también polvareda. Intentan presentar como habitual algo que, según recuerdan muchos internaturas, está muy lejos de serlo.
Lo que está relatando hoy Ramón Espinar es memoria viva de lo que le ha pasado a miles de jóvenes. Al menos en Madrid
— Aitor Riveiro (@ikaitor) November 2, 2016
