Los bebés fallecidos antes de nacer, pero que hubieran alcanzado más de seis meses de gestación, deberán ser inscritos y podrán tener nombre en el archivo del Registro Civil desde este miércoles, aunque esa inscripción no tendrá efectos jurídicos, según el Boletín Oficial del Estado (BOE). Para muchas familias como la de Luisa García, autora del libro Mi bebé estrella. Una historia de muerte perinatal, es un paso "muy importante" que ayuda a "honrar a los niños para que mantengan su identidad", según ha explicado en el programa En Casa de Herrero en esRadio.
Hasta ahora, los datos de estos fallecimientos se registraban en el "legajo de criaturas abortivas", donde ni siquiera constaba el nombre del bebé. La nueva norma también es aplicable a los niños fallecidos antes de la entrada en vigor de la ley, siempre que los padres lo soliciten en los próximos dos años. Aunque no tiene efectos jurídicos, las familias afectadas lo que hoy se ha conseguido es un paso muy importante para que socialmente se reconozca el duelo de la muerte perinatal.
Luisa García ha reconocido En Casa de Herrero que la noticia le ha emocionado: Es muy importante porque la inscripción en el Registro Civil no es solo un trámite burocrático sino es un acto de la vida para reconocer la existencia de un ser humano, como es el caso de nuestros bebés. Cualquier familia que haya pasado por un trance como este y haya tenido que acceder al Registro de legajos abortivos sabe que es un proceso doloroso y complicado por toda la burocracia que existe alrededor. Hoy es un día muy positivo".
En España se producen en torno a 2.000 muertes intrauterinas al año durante el tercer trimestre de gestación. Se trata Son cinco bebes de cada 1.000 nacidos, según recoge un informe de Umamanita, la asociación de apoyo, sensibilización y humanización de la atención a la muerte y el duelo perinatal.
Reconocimiento al duelo perinatal
Socialmente, el duelo perinatal no está lo suficientemente reconocido. Pero, según los expertos, la posibilidad de inscribir en el Registro Civil a los bebés fallecidos antes de nacer con más de seis meses de gestación es un paso adelante para ayudar en ese duelo de las familias, además de reconocer la identidad del bebé.
"Resulta sin ninguna duda un acierto para la sociedad española. Simboliza el reconocimiento de sufrimiento de las familias y además les ayuda en ese primer paso del proceso psicológico del duelo de afrontar ese dolor y así poder llevar a buen puerto todo ese proceso de ajuste psicológico que les lleve de nuevo al bienestar emocional", explica María Dolores Martínez Vilches, psicóloga sanitaria experta en duelo.
"La experiencia por las que pasamos las familias, es que son nuestros hijos, no entes o fetos. Les conocemos antes de nacer, e incluso tenemos fotos de ellos", destaca Luisa García, que perdió a su pequeño Miguel durante el tercer trimestre de gestación y ya ha pedido cita en el registro: "Es medicina para el alma. Va a mejorar muchísimo el duelo de las familias", ha insistido.
Archivo de fallecidos antes de nacer
En concreto, el Registro Civil dispondrá de un archivo en el que se conservarán debidamente numeradas y ordenadas las declaraciones (modelo 9 bis), firmadas por el declarante y al menos, por dos facultativos, relativas a los fallecimientos ocurridos con posterioridad a los seis primeros meses de gestación y antes del nacimiento, con indicación, en su caso, del nombre a imponer al nacido sin vida.
El registro tendrá un índice en el que constará el nombre y apellidos de la madre y, en su caso, el del hijo, y se numerará correlativamente, a los efectos de poder facilitar la búsqueda. Asimismo, a solicitud de cualquiera de los progenitores se expedirá una certificación en la que constarán los datos del alumbramiento, el nombre, en su caso, del hijo o hija no nacidos.