El PRI comienza a pagar la crisis política de Tabasco

El Partido Revolucionario Institucional (PRI), que gobernó México durante 71 años, empieza a pagar el coste de la crisis política de Tabasco, sur de México, que ha provocado la dimisión de un diputado y ha reavivado las voces contra la vieja cultura del partido. La dimisión de Humberto Mayans podría, según la prensa local, ir seguida en las próximas horas de la renuncia de otros cuatro legisladores del partido.

De confirmarse estos rumores, el PRI quedaría en una situación delicada en la Cámara Baja, donde cuenta con 211 legisladores, frente a los 206 de Acción Nacional (PAN), el partido del presidente del país, Vicente Fox. Mayans acusó anoche a la dirigente nacional del PRI, Dulce María Sauri, de defender los intereses "caciquiles" de quienes tratan de aferrarse al poder en Tabasco, donde, por primera vez, las autoridades electorales anularon hace una semana unos comicios para renovar el Gobierno.

Tras la decisión del Tribunal Federal Electoral, el PRI impuso su mayoría en el Congreso local para reformar las leyes y nombrar un gobernador interino, Enrique Priego, estrechamente relacionado con el anterior cabeza del Gobierno, Roberto Madrazo. La oposición se rebeló y nombró a su vez a otro interino, Adán Augusto López, también del PRI, pero conocido por su talante negociador. El Gabinete de Fox no ha reconocido aún formalmente a ninguno de ellos, aunque el titular de Gobernación (Interior), Santiago Creel, apuntó anoche que se "entiende con el Gobierno en funciones", lo que la prensa mexicana interpretó este sábado como un aval para Priego.

Creel reiteró que el Ejecutivo confía en que los principales partidos del país, PRI, PAN y el izquierdista de la Revolución Democrática (PRD), cumplan el compromiso adquirido el miércoles y acuerden una solución que respete la soberanía del estado. Según el diputado Mayans, las maniobras del PRI en Tabasco lo han convertido en "un lastre para la nación" y un "riesgo para la estabilidad" política del país. El legislador se refirió al ex gobernador Roberto Madrazo, a quien la prensa nacional señala como responsable último de la crisis, como "un cacique de los años 30", y denunció que el PRI dio un "auténtico golpe de estado" en la entidad.