Colabora

Trump designa a Antifa organización terrorista tras el asesinato de Charlie Kirk

Trump acusa al movimiento de ultraizquierda de ser una "organización militarista y anarquista" que promueve la violencia y la coerción.

Una manifestante antifa en Portland (Oregón) | Cordon Press

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha firmado este lunes una orden para designar al movimiento de ultraizquierda Antifa como una "organización terrorista nacional". La Casa Blanca argumenta que este grupo "exige explícitamente el derrocamiento del Gobierno de Estados Unidos", así como de las autoridades policiales y del sistema legal del país.

En el documento, la Administración Trump denuncia que Antifa es una "organización militarista y anarquista" que lleva a cabo "esfuerzos coordinados para obstruir la aplicación de las leyes federales". Se citan como ejemplos los enfrentamientos armados con las fuerzas del orden, disturbios organizados y agresiones violentas contra agentes federales.

Washington acusa además a este movimiento radical de "reclutar, entrenar y radicalizar a jóvenes estadounidenses" para que se sumen a sus acciones violentas. La orden también señala la "divulgación sistemática de información personal" de figuras políticas y activistas como una de sus tácticas de intimidación habituales.

Por todo ello, la Casa Blanca concluye que este esfuerzo, diseñado "para lograr objetivos políticos mediante la coerción y la intimidación, constituye terrorismo doméstico". La orden establece que los departamentos y agencias federales deberán utilizar todas sus facultades para investigar y desmantelar las operaciones ilegales de Antifa y de quienes actúen en su nombre.

Reacción al asesinato de Charlie Kirk

El asesinato de Charlie Kirk parece haber actuado como un catalizador directo para la decisión del presidente Donald Trump. Según reportes, Trump vinculó explícitamente esta medida a una ofensiva contra la "violencia de la izquierda radical" en respuesta al asesinato del activista conservador. Aunque la investigación federal no ha encontrado evidencia concluyente de vínculos entre el asesino, Tyler Robinson, y grupos de izquierda como Antifa hasta la fecha, los mensajes que dejó grabados en las balas dejaban clara su afinidad ideológica con los mismos.

Esta designación ha generado debates sobre su legalidad, ya que no existe un proceso claro para designar grupos domésticos como terroristas, a diferencia de los extranjeros. No obstante, aunque la designación no sea legal, Trump tiene toda la libertad para ordenar a sus subordinados que dediquen una atención prioritaria al grupo.

Temas

Ver los comentarios Ocultar los comentarios

Portada

Suscríbete a nuestro boletín diario