El Partido Popular de Austria (OVP) del primer ministro, Sebastian Kurz, se ha impuesto con claridad en las elecciones legislativas anticipadas celebradas este domingo con un 37,1 por ciento de votos, según proyecciones sobre voto real recogidas por la agencia de noticias austriaca APA.
"Hoy es el día de Sebastian Kurz y del Partido Popular", ha destacado el secretario general del OVP, Karl Nehammer, quien ha celebrado el "histórico" triunfo de su formación.
Kurz aprovecharía así el hundimiento del Partido de la Libertad de Austria (FPO), que cae diez puntos con respecto a los últimos comicios y se sitúa en el 16,7 por ciento de apoyo, afectado por el escándalo conocido como 'Ibizagate'. El secretario general del FPO, Harald Vilimsky, ha subrayado tras conocerse los resultados que "no hay un mandato claro para seguir con la coalición".
En segunda posición se situaría el Partido Socialdemócrata de Austria (SPO), que cosecha su peor resultado histórico de la Segunda República austriaca con un 22,5 por ciento de apoyo, 4,4 puntos menos que en 2017. Por detrás quedan Los Verdes (13,1 por ciento, su máximo histórico) y el liberal NEOS, que pasa del 5,3 al 7,8 por ciento.
Estos datos suponen la mayor ventaja jamás lograda por un partido ganador en unas elecciones austriacas desde la Segunda Guerra Mundial, ya que el OVP tendría 14,6 puntos de ventaja sobre los socialdemócratas, quienes ostentaban el anterior récord tras lograr 10,7 puntos de ventaja en los comicios de 1990.
En cuanto a la aritmética electoral, sería viable tanto una coalición OVP-FPO como una OVP-SPO, aunque igualmente podría ser posible una colaboración de los conservadores con Los Verdes y NEOS.
El proceso en cualquier caso pasa por el presidente federal austriaco, Alexander Van der Bellen, quien ha destacado este mismo domingo que no tiene ninguna prisa para la formación del próximo gobierno.