"La solución está en unificarse en una medida, que haya elecciones libres, y me refiero a elecciones independientes, con todas las garantías internacionales, y con una agenda de recuperación económica", dijo Iván Duque en un encuentro con la prensa extranjera en Bogotá.
El mandatario, que lidera en América Latina el apoyo al presidente del Parlamento de Venezuela, Juan Guaidó, reconocido como presidente interino por más de 50 países, manifestó que "la crisis en Venezuela será peor si la dictadura sigue". En ese sentido, aseguró que "se necesita apoyo internacional para que cese la dictadura", como se refiere al régimen de Nicolás Maduro, y para que "se recupere la economía".
"Mi lectura es que es un deber de la comunidad internacional que defiende valores democráticos apoyar para que se dé una transición en Venezuela", manifestó el presidente colombiano, quien dijo que hay "que perseverar y acelerar" los cambios. Esa transición, aseguró, "tiene que ampliarse" con un Gobierno "en el que deben estar todos los sectores, incluido el chavismo", que ha dominado la vida política de Venezuela en los últimos 20 años.
Con respecto al apoyo internacional, dijo que debe haber "una mesa de donantes con compromisos reales y rápidos", ya que la crisis humanitaria de Venezuela es tan grave como la de Siria y el mayor peso en la ayuda a quienes emigran de ese país lo ha llevado Colombia pues comparten una frontera de 2.219 kilómetros.
Sobre el apoyo incondicional de su Gobierno a Guaidó, Duque destacó que 57 países, entre ellos Colombia, lo reconocen como presidente "interino" y esto ha servido "para que en la comunidad internacional se entienda la gravedad de la situación" de Venezuela, de la cual han emigrado en los últimos años más de cuatro millones de sus ciudadanos.
Al referirse a las críticas que recibe de algunos sectores por la acogida que Colombia ha dado a más de 1,7 millones de venezolanos que se han establecido en el país en los últimos años, Duque respondió que no se puede "estar tomando decisiones sujetas a las encuestas". "Con Venezuela tenemos una relación casi que umbilical", manifestó, y por eso defendió la "política migratoria fraterna y ordenada" de su Gobierno, que ha concedido la ciudadanía a más de 24.000 hijos de venezolanos nacidos en Colombia.