Publicidad Bayer
En la labor de Estudios Moro para aspirinas Bayer y otros medicamentos cobra relevancia la figura de Pablo Núñez, que trabajó hombro con hombro con José Luis Moro. El humor se potencia todavía más.
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La Faraona
La gitana del anuncio de Estudios Moro fue sin duda la genial Lola Flores, "La Faraona", aquí fotografiada por Román para una portada francesa de El televisor. Un tema con una divertida letra sobre el televisor que le toca a una familia gitana: "Y esta mi casa es un horror desde que tengo televisor". Disco publicado en 1958.
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Remedio de salvación
Anuncio de los tiempos de Maricastaña (c. 1945) en el que un diestro con dolor de cabeza concita la crítica de los aficionados hasta que, a punto de perder la razón y la fama, se toma una aspirina Bayer y vuelve a triunfar en los tendidos.
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¡Mucho ojo!
Anuncio para diarios y revistas de la campaña publicitaria que realizaría Estudios Moro en 1959.
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Don Tristón
Popular anuncio-regalo de una tarjeta con un perfil que se componía moviendo una cadena, que iba cambiando la nariz del personaje. Ésta es un regalo de aspirinas Bayer.
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¡Qué dolor!
Surrealista anuncio de aspirinas en el que Don Pancho y los animales de la granja recobran la alegría y el buen humor gracias a una Aspirina Bayer (c. 1940).
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¡Detengan al ratero!
La competencia directa de Aspirinas Bayer era el "Calmante Vitaminado", muy popular por los años 40 y 50, que además de calmar el dolor de cabeza aliviaba catarros, gripes y dolores nerviosos. La idea publicitara presentaba al resfriado como un ratero que robaba el bienestar.
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Tonificante
Con una simple aspirina de Calmante vitaminado, "¡ya todo ha pasado!" Pareado que su sola invocación causaba satisfacción. Además, la vitamina B-1 tonificaba el sistema nervioso. Pese a sus cualidades, fue desapareciendo, tras su fusión con Rumasa, aunque seguía fabricándose hasta 2012, cuando la empresa entro en situación concursal.
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Filmina
En los años 50, la imagen del dolor de cabeza se relacionaba con un hombre cogiéndose la cabeza, seriamente dolorido y una tableta milagrosa: Okal. Esta es una de esas filmina que se proyectaban en los cines antes de que apareciera los filmlets de Estudios Moro.
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Dolor, gripe, enfriamiento: ¡Okal!
Caja metálica de pastillas Okal. Su primitivo anuncio radiofónico era una melodía tan reconocible como el spot de Pablo Núñez del sargento que pasa revista a unos doloridos soldados y los pone firmes a la voz de ¡Okal!
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La hora XXV
El Penidrín se anunciaba en revistas para consumo interno de médicos y farmacéuticos. Este sensacional anuncio de Tusell fue publicado, como los siguientes, en la revista "La hora XXV", en la que se publicaban numerosos relatos breves de grandes autores y colaboraciones literarias de médicos ilustrados.
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Prurito
La molesta idea del prurito y esa garra rascando en el vacío denota la plasticidad de los publicista que diseñaron en los años 50 y 60 estos anuncios, cuya moderna inspiración es el publicista Saul Bas. (1959)
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Espectro
La influencia de los títulos de crédito de Vértigo (1958), de Saul Bass, es evidente en este anuncio de la casa Hubber de 1961.
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Sulfamidas
El anuncio de este sulfamidas no puede ser publicitariamente más contundente. La sensación de que la actuación del medicamente será efectiva, directa al centro del problema, se muestra con esas agresiva flechas.
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Quemazón
Aquí vuelve a verse la influencia de los créditos de "Carmen Jones" (1954), de Saul Bass.
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Un aprieto
De nuevo el dibujante y publicista Tusell logra plasmar de forma divertida un apretón callejero y la solución más rápida contra diarreas, colitis y demás infecciones intestinales.
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Alegría
Elegante anuncio para publicitar un mediamente contra la diarrea estival con un sol con una sonrisa tan grande como una raja de sandía.
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Tos de mil demonios
Otro de los contundentes anuncios para medicamentos publicados en la revista "La hora XXV", en 1964. Muchos de estos anuncios procedían de la imaginación del diseñador Pla Narbona.
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Abstracción
Un castillo de fuegos artificiales un tanto abstracto parece lo más adecuado para festejar la aparición de nuevos antibióticos.
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Diana
Un supositorio directo al centro de la diana del bienestar.
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Anticolesterolémico
En 1962, esta medicina para bajar el coresterol era la más indicada para "los hombres de empresa", quizá porque eran los más propensos económicamente para disparar el espectro lipidoideo patológico.
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