Viajo poco: no más de cuatro o cinco trayectos al año en avión comercial.
El sistema de cacheos lo encuentro humillante y aberrante. Hace poco, exactamente anteayer y después de haberme quitado el cinturón y demás, el agente encontró a la altura aproximada de mi tetilla izquierda, una bolsa de tela ligera con cierre de cremallera tocando a través de la camisa. Yo le expliqué que contenía una cantidad de Euros en efectivo inferior a quinientos. Me dijo que me quitara la camisa allí, delante de muchas personas. Me negué alegando razones de seguridad - no deseaba que nadie viera mi pequeña reserva de billetes- y de decoro personal. Me condujo a una cabina de muy malos modos, lo que me hizo esperar lo peor. Yo le indiqué suavemente en su idioma que si me iba a hacer objeto de alguna "técnica" agresiva que procurara matarme, porque soy buen fisonomista y me dejó sólo. Mi sorpresa fue grande cuando apareció otro agente que me dijo que no me desvistiera y que podía continuar.
Tengo el convencimiento de que los aparatosos controles tienen muy poca eficacia. Humildemente se me ocurren unas cuantas maneras -que no voy a publicar - de burlarlos, cualquiera que se haya movido en la Europa de la guerra fría entre el este y el oeste con fines de suguridad o información oficial o clandestina podría decir algunas más. Por otra parte, en el mismo episodio yo llevaba una botella de agua de medio litro que me tuve que beber en la zona libre. Cuando compré agua en la zona de seguridad una igual costaba 2'20 €.
Antes que hablar de decadencia de la sociedad yo pienso que hay un interés comercial. Me llama la atención que en España el filtro de seguridad del AVE sea similar al de los aeropuertos, pero en el AVE con presentarse diez minutos antes del viaje sea suficiente. Para volar al menos se necesitan 90 minutos. ¿Cual es el interés comercial o de otro tipo? ¿Porqué en lugar de obligar a consumir el agua no comprueban que es agua de verdad?. Hay que tener en cuenta que, aunque sea fundamental para preparar algún explosivo, cosa que me permito dudar, un posible malvado va a tener agua a su disposición en cualquier parte del recorrido, pagando cantidades que, si bien son elevadas, seguramente son asumibles para la mayoría de las organizaciones terroristas, o al menos para muchas de ellas.
Lo malo de todo esto es que nadie se responsabiliza de lo que ocurre en la zona de cacheos. El año pasado en Mexico D.F. me requisaron un rollo de precinto de plástico de 48mm de ancho. La medida es importante porque hay una norma que impide llevar en cabina cinta adhesiva de más de 50mm. En ese momento ¿a quién recurres?. Estoy convencido que el precinto le gustó al agente. Lo llevo siempre en el equipaje de mano para darle una vuelta al equipaje fadturado y mejorar su visibilidad y su resistencia a los golpes - una vez me reventaron una maleta que se cayó de un remolque- y nunca me lo habían quitado.
Podría seguir. El verdadero problema es que los legisladores van en vuelos privados o en gran clase, dónde todo cambia.
¿Esta gente se piensa realmente que van a resolver algo con esto?, Mientras estos perspicaces agentes del aeropuerto hacen cosas como esta el verdadero terrorista que está planeando hacer su fechoría se ha ido de rositas. Esto es indigno e inmoral.
Totalmente de acuerdo con Chemi_Re. El detalle de la raza de la niña, así como lo de la ropa tan ajustada debería haber sido suficiente para si no evitar el cacheo, sí al menos hacerlo de otra forma no tan exagerada. Fastidia, y mucho, que haya restricciones en los aviones por culpa de unos cuantos - los de siempre - con quienes encima hemos de ser tolerantes. Cada vez que paso un control de aeropuerto me dan ganas de decir que no tengo pinta ni de antisistema ni de terrorista islámico y que si quieren les quemo un Corán ahí mismo junto con un ejemplar de El manifiesto comunista y una camiseta del Che, pero que me dejen subir al avión con lo que me de la gana, que para eso vivo en una democracia y no en Corea del Norte.
La decadencia consiste en haber perdido el sitio frente a los enemigos de nuestra civilización -externos y estúpidos internos- con conductas tolerantes ante los intolerantes.
Los terroristas islamistas (entre otros) son capaces de introducir explosivos en la vagina de sus mujeres, que aceptan gustosas el "martirio", con lo que toda precaución es poca.
Esos sí, dada la raza de la niña y la ropa tan ajustada que lleva, el cacheo por parte de la agente -cuyos antepasados no parecen provenir de nuestra civilización occidental, por cierto- parece algo excesivo.
¿Qué hemos llegado a ser?
Esto es absolutamente indigno. Una clara señal de la decadencia de la civilización occidental es que los ciudadanos nos dejamos hacer estas cosas sin rechistar.