Los dos cooperantes españoles liberados ayer, miércoles, en Mali tras nueve meses de secuestro, Ainhoa Fernández de Rincón y Enric Gonyalons, han llegado este jueves a la base aérea de Torrejón de Ardoz (Madrid) poco antes de las 20.00 horas, donde les esperaban sus familias y la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Saénz de Santamaría.
Tras bajar las escalerillas del avión, Fernández y Gonyalons se han abrazado sonrientes y visiblemente contentos a sus familiares que les esperaban en la pista de aterrizaje. El Gobierno ha decidido que el recibimiento se celebrara en la intimidad y sólo ha permitido que una cámara de televisión y un fotógrafo registraran la llegada de los cooperantes, que han volado en un avión militar desde una base de Burkina Faso.
Junto a Sáenz de Santamaría ha acudido también a la base aérea el secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Gonzalo de Benito.
Antes de partir rumbo a España, Gonyalons y Fernández han comparecido ante la prensa junto con la cooperante italiana Rossella Urru, con la que han compartido cautiverio. "Nos gustaría agradecer el trabajo del pueblo de Burkina y el interés por nosotros", ha dicho Gonyalons. Posteriormente, los tres cooperantes se han dirigido hacia los aviones que les trasladarán, respectivamente, a España e Italia.
Por su parte, el subsecretario de Asuntos Exteriores, Rafael Mendívil, ha declarado a EFE: "Finalmente, todo ha salido bien. Ha sido un proceso realmente más largo del que hubiéramos deseado, pero nuestros compatriotas han sido liberados y están con buena salud", ha comentado Mendívil.
El subsecretario ha subrayado que el éxito de la operación pone de manifiesto que la acción exterior, con la participación de diversos organismos, "funciona". "Es una labor discreta y callada que en el fondo lo único que busca son resultados y remediar situaciones indeseadas", ha señalado.
Además de expresar su "enorme satisfacción" por el fin del secuestro, ha destacado la alegría de los familiares de los cooperantes por su reencuentro.