L D (EFE) Castro, en un discurso leído de unos 45 minutos, ha criticado de nuevo la globalización neoliberal, la cual, ha dicho, "creó un verdadero desastre". Según Castro, que vistió su uniforme militar de gala, "fue América Latina la región del mundo donde con más rigor y exigencia se aplicó la globalización neoliberal".
"Ahora (la región) enfrenta el desafío del ALCA que barrería las industrias nacionales y convertiría el MERCOSUR y al Pacto Andino en un apéndice de la economía norteamericana", afirma. Añade Castro que la aplicación del ALCA, que propugna EEUU y que deberá entrar en vigor en 2005, sería "un asalto final contra el desarrollo económico, la unidad y la independencia de los pueblos latinoamericanos".
"Pero si ese intento de anexión se consumara, el orden económico seguiría siendo insostenible, tanto para los pueblos de América Latina como para el propio pueblo de EEUU, que ve amenazados sus empleos por una abundante mano de obra barata", agrega Castro. El dictador cubano dice que esa mano de obra barata sería reclutada por las maquiladoras (ensambladoras) "entre aquellos a quienes la pobreza, el desastre educacional y el desempleo reinantes les impidió obtener una adecuada calificación". "Mano de obra barata y no calificada es algo que pueden ofrecer masivamente las oligarquías latinoamericanas", apostillaba Castro en su discurso.
Por otra parte, el presidente cubano expresaba su "profunda convicción" de que "nuestra especie y, con ella cada unos de nuestros pueblos, se encuentran en un momento decisivo de su historia. O cambia el curso de los acontecimientos, o no podría sobrevivir", remarcaba. Asimismo, Fidel Castro, de 77 años, afirmaba que "no es poco el trabajo que nos espera en el 2004", y felicitaba al pueblo cubano "por todo lo que ha hecho a lo largo de estos años, por su heroísmo, su patriotismo, su espíritu de lucha, su lealtad y fervor revolucionario".
"Ahora (la región) enfrenta el desafío del ALCA que barrería las industrias nacionales y convertiría el MERCOSUR y al Pacto Andino en un apéndice de la economía norteamericana", afirma. Añade Castro que la aplicación del ALCA, que propugna EEUU y que deberá entrar en vigor en 2005, sería "un asalto final contra el desarrollo económico, la unidad y la independencia de los pueblos latinoamericanos".
"Pero si ese intento de anexión se consumara, el orden económico seguiría siendo insostenible, tanto para los pueblos de América Latina como para el propio pueblo de EEUU, que ve amenazados sus empleos por una abundante mano de obra barata", agrega Castro. El dictador cubano dice que esa mano de obra barata sería reclutada por las maquiladoras (ensambladoras) "entre aquellos a quienes la pobreza, el desastre educacional y el desempleo reinantes les impidió obtener una adecuada calificación". "Mano de obra barata y no calificada es algo que pueden ofrecer masivamente las oligarquías latinoamericanas", apostillaba Castro en su discurso.
Por otra parte, el presidente cubano expresaba su "profunda convicción" de que "nuestra especie y, con ella cada unos de nuestros pueblos, se encuentran en un momento decisivo de su historia. O cambia el curso de los acontecimientos, o no podría sobrevivir", remarcaba. Asimismo, Fidel Castro, de 77 años, afirmaba que "no es poco el trabajo que nos espera en el 2004", y felicitaba al pueblo cubano "por todo lo que ha hecho a lo largo de estos años, por su heroísmo, su patriotismo, su espíritu de lucha, su lealtad y fervor revolucionario".