LD (Agencias) El ministro de Interior, Ramil Usúbov, informó de que las fuerzas policiales detuvieron a 196 personas durante los disturbios, que causaron al menos un muerto y casi un centenar de heridos en el centro de la capital. Según Usúbov, hay datos que permiten afirmar que los incidentes fueron organizados por Isá Gambar, líder del partido de oposición nacionalista Musavat, quien denunció que la victoria electoral del primer ministro, Ilham Alíev, fue producto de un fraude.
Según datos oficiales aún no definitivos, Ilham, hijo del presidente saliente, Heidar Alíev, obtuvo casi el ochenta por ciento de los votos, seguido de Gambar, con poco más del diez por ciento. Apenas se anunciaron esos resultados preliminares, el líder de Musavat se proclamó a su vez vencedor en un mitin junto a la sede de su partido, que fue disuelto violentamente por destacamentos de la policía antidisturbios. Horas después, miles de sus partidarios se apoderaron de las calles céntricas de la ciudad, donde se produjeron encarnizados choques entre los manifestantes y la policía, que necesitó el apoyo de las tropas del ministerio del Interior para controlar la situación.
La batalla campal callejera continuó a lo largo del día, con la utilización de vehículos antidisturbios con cañones de agua por parte de la Policía, mientras los manifestantes hacían uso de barras de hierro y piedras. Según el parte oficial, en los incidentes resultaron heridos cincuenta policías, 17 soldados de las tropas del Interior y "más de veinte manifestantes". Las imágenes de televisión mostraron incluso el cuerpo de un niño inconsciente que fue retirado de uno de los escenarios de los enfrentamientos y trasladado a un hospital.
Según datos oficiales aún no definitivos, Ilham, hijo del presidente saliente, Heidar Alíev, obtuvo casi el ochenta por ciento de los votos, seguido de Gambar, con poco más del diez por ciento. Apenas se anunciaron esos resultados preliminares, el líder de Musavat se proclamó a su vez vencedor en un mitin junto a la sede de su partido, que fue disuelto violentamente por destacamentos de la policía antidisturbios. Horas después, miles de sus partidarios se apoderaron de las calles céntricas de la ciudad, donde se produjeron encarnizados choques entre los manifestantes y la policía, que necesitó el apoyo de las tropas del ministerio del Interior para controlar la situación.
La batalla campal callejera continuó a lo largo del día, con la utilización de vehículos antidisturbios con cañones de agua por parte de la Policía, mientras los manifestantes hacían uso de barras de hierro y piedras. Según el parte oficial, en los incidentes resultaron heridos cincuenta policías, 17 soldados de las tropas del Interior y "más de veinte manifestantes". Las imágenes de televisión mostraron incluso el cuerpo de un niño inconsciente que fue retirado de uno de los escenarios de los enfrentamientos y trasladado a un hospital.