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Militares franceses asaltan un barco en Córcega que había sido tomado por trabajadores en huelga

Un barco de la Sociedad Nacional Marítima Córcega-Mediterráneo (SNCM), fondeado frente al puerto de Bastia, ha sido tomado por militares franceses. El navío había sido secuestrado en Marsella y desviado por marinos huelguistas del Sindicato de los Trabajadores Corsos que protestan por el proceso de privatización de la naviera.

Un barco de la Sociedad Nacional Marítima Córcega-Mediterráneo (SNCM), fondeado frente al puerto de Bastia, ha sido tomado por militares franceses. El navío había sido secuestrado en Marsella y desviado por marinos huelguistas del Sindicato de los Trabajadores Corsos que protestan por el proceso de privatización de la naviera.
LD (EFE) Medios de comunicación de Córcega han confirmado que comandos de la Marina francesa, apoyados por efectivos del cuerpo de intervención de la Gendarmería y helicópteros, recuperaron el control del barco "Pascal Paoli", propiedad de la SNCM que había sido tomado y desviado la víspera por marinos huelguistas del Sindicato de los Trabajadores Corsos en protesta por la privatización de la naviera.
 
Los efectivos militares vestidos de negro y encapuchados descendieron por cuerdas hasta la cubierta, sin que los marinos huelguistas opusieran resistencia. La operación duró apenas un minuto en el barco, que en el momento del asalto intentaba entrar en el puerto de Bastia, al norte de la isla mediterránea. El prefecto de Córcega había avisado a los marinos de que si intentaban entrar en el puerto se lo impediría "por la fuerza". Los trabajadores  están bajo arresto.
 
Los muelles del puerto de Bastia estaban desiertos en el momento de la operación militar, después de haber sido desalojado por unos doscientos efectivos antidisturbios, tras los violentos choques ocurridos durante entre las fuerzas del orden y manifestantes apoyados por nacionalistas corsos.
 
El "Pascal Paoli", uno de los buques más modernos y grandes de la naviera, está ahora camino del puerto de Tolón (sureste). El buque había sido tomado en Marsella (sureste de Francia). La Fiscalía abrió una investigación, confiada a la gendarmería marítima, por el secuestro del barco, un delito punible con hasta veinte años de prisión.
 
En un intento de reducir la tensión, el Gobierno anunció que el Estado conservaría una parte "minoritaria" en la SNCM, que ha decidido vender al fondo de inversiones "Butler Capital Partners" (BCP). Pero el anuncio no satisfizo a los sindicatos de la SNCM y de los trabajadores del puerto de Marsella, que anoche decidieron prorrogar hasta este miércoles la huelga, con la consiguiente parálisis del puerto

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