"Los dirigentes que adoptan decisiones políticas sobre autonomías y territorios deben tener en cuenta la opinión de las personas que viven en esos territorios, porque si se ignora la voluntad de la población, es imposible solucionar los problemas de organización política que fue lo que ignoraron las autoridades georgianas", comentó el primer ministro.
Explicó que durante muchos años Moscú defendió el principio de la integridad territorial de las repúblicas que formaron parte de la antigua Unión Soviética y que, en este sentido, Georgia debió, según Putin, demostrar respeto, flexibilidad y prudencia ante las aspiraciones separatistas de Abjasia y Osetia del Sur.
"Pero en la práctica hicieron todo lo contrario, aplicaron la presión militar, anularon los derechos que tenían las autonomías y finalmente optaron por la agresión armada, un crimen que ocasionó numerosas víctimas entre la población civil y los voluntarios de las brigadas de defensa", subrayó el primer ministro ruso en declaraciones recogidas por la agencia oficial rusa, RIA Novosti.
Añadió que tras la guerra desatada por Georgia contra Osetia del Sur, Rusia la única solución posible, defender la población suroseta y abjasia, castigar y desarmar al agresor y reconocer la independencia de Abjasia y Osetia del Sur.
"Después de lo que ocurrió, a mi juicio creo que se logró la estabilización del Cáucaso , porque la situación de Osetia del Sur y Abjasia quedó clara y definida. El precedente jurídico adoptado nos permite desarrollar relaciones con Abjasia y Osetia del Sur como estados independientes sin tener en cuenta la opinión de aquellos que no estén de acuerdo", indicó Putin.