L D (Europa Press) La UE revisará esta semana la efectividad de las sanciones contra la dictadura de Castro gracias a la acción diplomática del Gobierno de Zapatero que también ha conseguido que la Eurocámara vote una Resolución que pide subordinar el levantamiento de las medidas a avances en materia de Derechos Humanos
Esta revisión ha sido promovida por el Gobierno español quien ha enviado a un funcionario del Ministerio de Asuntos Exteriores de gira por varios países de la UE para explicar su posición de modificar el estado de las relaciones bilaterales, en especial, respecto a las invitaciones a disidentes a las recepciones en las embajadas europeas.
Aunque el resultado de la reunión todavía es incierto debido a que cualquier cambio requiere la unanimidad de los Veinticinco, según fuentes comunitarias, "comienza a apuntarse un sentimiento de que es necesaria una modificación de las medidas a favor de las tesis de España",
A Zapatero no le gustan las sanciones contra la tiranía castrista
El Gobierno de Zapatero cree que las sanciones tienen un impacto muy limitado, que impiden a la Unión Europea perseguir los objetivos de fondo de su posición común, que aboga por avances en materia de Derechos Humanos. La mayoría de los socios europeos, salvo República Checa y otros de los nuevos Estados miembros, son en principio partidarios de suavizar las sanciones, puesto que sólo han conseguido congelar las relaciones sin más efecto dar cierto reconocimiento a la oposición dentro de la isla.
El Gobierno dice que no pretende "marginar a la disidencia", sino establecer una relación que no esté basada en invitaciones a cócteles y recepciones de carácter más social, sino en contactos más políticos y continuados, así como posibles invitaciones para que dirigentes de la oposición interna viajen a Europa. Miguel Angel Moratinos, ministro español de Asuntos Exteriores, afirmó recientemente que "lo que España quiere cambiar es esa decisión de invitar a los disidentes a las fiestas nacionales".
Diferencias entre conservadores y socialistas en el Parlamento Europeo
Por su parte, esta semana el Parlamento Europeo también emitirá un pronunciamiento sobre las relaciones de la Unión respecto a Cuba. Mientras los liberales y conservadores europeos subrayan como "condición indispensable" para modificar las sanciones, "avances significativos" en materia de Derechos Humanos, los socialistas reclaman un diálogo con las autoridades dictatoriales de Cuba.
Los conservadores reclaman la liberación de todos los presos políticos, la autorización de venir a Europa al premio Sájarov 2002, Osvaldo Payá, y que el régimen muestre "avances significativos en cuanto a la promoción de la democracia y el respeto de los Derechos Humanos y Libertades Fundamentales básicas". Apunta, además, que las detenciones de opositores "vulneran los más elementales Derechos Humanos, en especial la libertad de expresión y de asociación política".