De la Vega dice que Marruecos y España han estado distantes por "reproches y tensiones innecesarios"

L D (Agencias) José Luis Rodríguez Zapatero viaja este sábado a Marruecos, acompañado de los ministros de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, e Interior, José Antonio Alonso. Se trata de su primer viaje oficial al extranjero como jefe del Ejecutivo. Entre los asuntos que analizará con Mohamed VI y el primer ministro marroquí, Driss Yetú, destacan la inmigración y la lucha antiterrorista.

La del sábado no será la primera entrevista que mantengan el presidente español y el rey de Marruecos: Zapatero rindió visita a Mohamed VI en diciembre de 2001, cuando las relaciones entre Rabat y Madrid atravesaban una profunda crisis. Cabe recordar que el entonces jefe de la oposición se dejó fotografiar ante un tapiz donde aparecían las Islas Canarias, Ceuta y Melilla como territorios marroquíes.

De la Vega dice que estamos ante "el reencuentro de dos naciones"

Según Fernández de la Vega, el viaje de Zapatero –el primero que efectuará como presidente del Gobierno– al país vecino "supone el reencuentro de dos naciones que, aunque separadas sólo por unas millas de agua, han estado demasiado distantes en los últimos tiempos por reproches y por tensiones innecesarias".

"Marruecos y España necesitan entenderse", añadió Fernández de la Vega. Además, dijo que la visita es importante también por el interés que tienen Madrid y Rabat en  demostrar que no hay dos civilizaciones enfrentadas, la árabe y la occidental. "Sólo existe una civilización –afirmó–, la que planta cara a la barbarie del terrorismo con firmeza y por encima de la diversidad cultural, social o religiosa".

La portavoz del Ejecutivo hizo estas declaraciones durante la conferencia de prensa posterior al Consejo de Ministros de este viernes, el primero de carácter ordinario que ha celebrado el Gabinete Zapatero.

El PP reclama "inteligencia" y recuerda la anterior visita de Zapatero

El Partido Popular espera que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, gestione "con inteligencia" su viaje oficial a Marruecos, y que anteponga los intereses nacionales a cualquier otra cuestión. Asimismo, pide que no se cambie "unilateralmente", para satisfacer "a otros países", la posición española sobre el Sáhara.

En declaraciones a la agencia Europa Press, Jorge Moragas, responsable de política internacional del PP, hizo hincapié en la importancia que tiene el conflicto del Sáhara Occidental en las relaciones diplomáticas hispano-marroquíes. En este sentido, instó al Gabinete Zapatero a no modificar la posición que viene manteniendo España desde hace décadas: "Espero que el Gobierno socialista no altere unilateralmente la posición de España en relación con el Sáhara, y que, en su ánimo de satisfacer a otros países, no se cargue un elemento muy importante de nuestra política exterior y nuestra posición, alineada con Naciones Unidas, para que haya un acuerdo entre las partes".

Por su parte, el oficialista Le Matin titula en primera: "Cumbre marroquí-española en Casablanca. El rey Mohamed VI y Zapatero quieren relanzar la cooperación bilateral", y subraya que, "en vísperas de su viaje a Marruecos, Zapatero tomó la decisión de cesar al embajador de España en Rabat, Fernando Arias-Salgado"; medida que los observadores han interpretado, dice el rotativo, "como una sanción a un diplomático que habría contribuido a deteriorar las relaciones entre Rabat y Madrid".

Asimismo, el semanario La Nouvelle Tribune abre con un "Zapatero, el clarificador de la normalización regional", mientras que Le Reporter exclama: "Zapatero y Moratinos en el Gobierno español... ¡qué felicidad!".