La portavoz del PP criticó que no compareciera ni el presidente, ni el vicepresidente, ni el ministro de Fomento, sino "el último en llegar al Ejecutivo", el ministro de la Presidencia, para pedir la prórroga del estado de alarma. Acusó al Gobierno de no haber sido capaz de encontrar una solución al conflicto y de tratar de convertir en un "trámite administrativo" el primer estado de alarma de la democracia.
Tras dejar claro que el problema lo causaron los controladores, dijo que ahora lo genera el Gobierno con su "incompetencia" para hacer frente a la situación con "recursos ordinarios". "Al PP le mueve la voluntad de garantizar los derechos de los españoles a desplazarse y protegerles de la incapacidad del Gobierno". Por ello, "este partido no se opondrá a la prórroga del estado de alarma, pero no puede apoyarlo".
Tras esto, preguntó a qué se ha dedicado el Gobierno durante estos quince días, qué les hace temer que se repitan los hechos, qué credibilidad le dan a los controladores y destacó que "falta la opinión del presidente". También se preguntó qué le hace pensar al Gobierno que en 30 días van a solucionar el problema, o que no se repetirá en febrero o en Semana Santa.
La portavoz popular pidió a José Blanco que "cuando el 15 de enero deje de estar alarmado piense si puede seguir alarmando a los españoles". De este modo, acusó al Ejecutivo de encerrarse en sus contradicciones lo que les incapacita, a su juicio, para explicar "los argumentos para ampliar el estado de alarma".
De este modo, Sáenz de Santamaría justificó su abstención afirmando que el Gobierno "nos obliga una y otra vez a elegir entre lo malo y lo peor". De este modo, indicó que "hay alternativas para todo, pero no para proteger a los ciudadanos del hundimiento de un Gobierno".
"Esperamos que cumplido el plazo Zapatero recoja el andamio sin que se le caiga encima", espetó la popular, que añadió que "Zapatero se ha convertido en un presidente excepcional, tan excepcional que ni siquiera se ha subido a esta tribuna para defender la ampliación". Pese a sus críticas al Gobierno y a los argumentos que ha dado, el PP se abstendrá en la votación.