L D (Europa Press) Esperanza Aguirre consideró que "solamente hay que recordar la imagen terrible de José Antonio Ortega Lara saliendo del agujero donde sus secuestradores lo habían tenido por más de 500 días y compararla con la naturalidad con la que muchos conciudadanos de aquellos incalificables criminales conviven con ellos, los apoyan o los alientan".
Con este ejemplo la presidenta quiso dejar claro que "la indiferencia ante el mal absoluto y el peligro de banalizar el mal desgraciadamente puede convivir con todos" y puede estar "siempre cerca". "Porque estamos contra los totalitarios tenemos que estar firmemente comprometidos contra los que de una u otra forma alientan cualquier manifestación de antisemitismo", apuntó Aguirre.
"Debemos estar siempre alerta ante todas las ideologías que supeditan la libertad y los derechos de los individuos a utopías o a mitos. Y no sólo estar alerta, sino que debemos comprometernos a luchar firmemente contra los que defienden esas políticas", apuntó la líder del PP madrileño.
Así, señaló que "los amantes de la libertad deben esforzarse en construir marcos políticos y culturales en los que sea imposible la aparición de las fuerzas capaces de llegar al horror absoluto como ocurrió en Alemania" durante la época nazi. "La primera obligación de todos los que creemos en la libertad es no traicionar la memoria de todas las víctimas del Holocausto", indicó la presidenta autonómica, y añadió que "todos los hombres deben recordar y rendir homenaje a los seis millones de judíos asesinados en el genocidio más execrable de la historia, y reflexionar sobre los totalitarismos y sobre lo cerca que se está de ellos".
Mientras, el embajador de Israel en España, Raphael Schutz, señaló que la "maldad humana no desapareció con la derrota de los nazis" y señaló casos de "genocidios" como el de Camboya, Ruanda, Darfur y los Balcanes y añadió que "hay quienes pretenden terminar la labor iniciada por Hítler".
"En los últimos años, el presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, ha declarado en reiteradas ocasiones su intención de borrar a Israel del mapa, llamamientos que han ido acompañados de pronunciamientos negando la verdad. El hecho de que en estos momentos Irán sea un miembro legítimo de la escena internacional es un eclipse moral de la Comunidad de Naciones y sus dirigentes", aseguró el embajador.
"Israel es un Estado que se fundó de en 1948, tres años después del fin de la II Guerra Mundial", señaló el embajador, quien añadió que "el Estado de Israel, contrariamente a lo que muchos piensan, no fue creado por el Holocausto". "En sí mismo como movimiento de liberación nacional del pueblo judío nació en el siglo XIX y llegó a su madurez antes de la I Guerra mundial", añadió.
Schutz también señaló que Israel "recibió a los que se salvaron de la tragedia", que es "el país de los supervivientes" y que "nunca habrá judíos indefensos ante una amenaza existencial". Por último, el representante israelí aseguró que la teoría del 'negacionismo' "no es la expresión de una idea académica susceptible de defender la libertad de expresión" y que el 'negacionismo' es "un llamamiento al racismo, antisemitismo y a la violencia".
Durante la ceremonia, se guardó un minuto de silencio en memoria de las víctimas del Holocausto, se leyeron varios textos y poesías para recordar a los fallecidos y se encendieron seis velas en honor a los seis millones de judíos que murieron a manos del movimiento nazi.
La primera de ellas homenajeaba a los exterminados por los nazis, la segunda al millón y medio de niños asesinados en las cámaras de gas, la tercera a las víctimas españolas en campos de concentración, la cuarta a los fallecidos del pueblo gitano y otros colectivos perseguidos por el nazismo, la quinta a los "justos" que ayudaron a los perseguidos y la última por los supervivientes.
A la ceremonia en homenaje a las víctimas del Holocausto acudieron el portavoz del Grupo Parlamentario del PP, Antonio Beteta; la portavoz del PSOE, Maru Menénez; el diputado de IU, Antero Ruiz; el Defensor del Menor, Arturo Canalda; el Defensor del Pueblo, Enrique Múgica; diputados de la Cámara, el rabino Moshé Bendahan, el presidente de la comunidad judía de Madrid, Jacobo Israel Garzón; y miembros de la comunidad judía de la capital, entre los que se encontraba un gran número de niños; así como los embajadores de Austria y Francia en España.