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LAS CLAVES DEL DEBATE

Este debate es el primero al que se enfrentan Rodríguez Zapatero como presidente del Gobierno y Mariano Rajoy como líder de la oposición. A las doce, el presidente ha abierto el debate y la tarde quedará para los cara a cara. El modelo nacional y el Pacto Antiterrorista centrarán los enfrentamientos más duros entre ambos líderes. Uno de los objetivos del PSOE en este debate es intentar demostrar la estabilidad del Gobierno y para eso se esforzará en contentar a sus socios de ERC e IU.

Este debate es el primero al que se enfrentan Rodríguez Zapatero como presidente del Gobierno y Mariano Rajoy como líder de la oposición. A las doce, el presidente ha abierto el debate y la tarde quedará para los cara a cara. El modelo nacional y el Pacto Antiterrorista centrarán los enfrentamientos más duros entre ambos líderes. Uno de los objetivos del PSOE en este debate es intentar demostrar la estabilidad del Gobierno y para eso se esforzará en contentar a sus socios de ERC e IU.
(Libertad Digital) El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha abierto a las doce del mediodía el decimoséptimo debate del estado de la nación de la democracia, que tendrá la lucha contra el terrorismo y el modelo nacional como principales asuntos de discusión con los grupos parlamentarios.

En su estreno como máximo responsable del Ejecutivo en un debate del estado de la nación, Rodríguez Zapatero pronunciará un discurso inicial en el que expondrá lo que para él han sido sus logros del primer año de Gobierno. Según informa Europa Press, ZP tiene intención de centrar su intervención inicial en tres aspectos: "la paz, la ciudadanía y el talante". Como principales logros presentará la huida de las tropas de Irak, la alianza de civilizaciones que propuso en la ONU, los matrimonios gays y el divorcio express y las relaciones con las comunidades autónomas y el resto de las instituciones del Estado.
 
Tras la intervención de Zapatero, la sesión será suspendida hasta las cuatro de la tarde, cuando se reanudará con la respuesta que a sus palabras dará ante la Cámara Baja el líder del PP, Mariano Rajoy, y para la cual dispondrá de treinta minutos. El portavoz parlamentario del PP, Eduardo Zaplana, aseguró que la situación ahora mismo en España es peor que hace un año y eso es lo que su presidente, Mariano Rajoy, tratará de hacer patente en su intervención.
 
El modelo de financiación autonómica, en plena polémica tras la propuesta presentada por la Generalidad de Cataluña, centrará buena parte del Debate. Zapatero defenderá un modelo único y propondrá consensuar el nuevo sistema con las comunidades autónomas a finales de este año. Zaplana se refirió con ironía al hecho de que el modelo de Estado marque este debate. Dijo que lo mejor de esta cita parlamentaria es que mantenga el nombre, porque el año que viene podría llamase el debate sobre "la nación de naciones". "En un país normal, demócrata, avanzado y vanguardista como queremos que sea España, lo normal es que habláramos de economía, Europa, de la mujer, de política a favor de los discapacitados, sociales, de cohesión", dijo. "Sin embargo, una parte fundamental va a consistir en lo que venimos denominando, o mal denominando, política territorial", añadió.
 
Rajoy entra en escena a las cuatro de la tarde

El discurso de Rajoy dará paso a un "cara a cara" con el jefe del Ejecutivo, en el cual contará con diez minutos de réplica y cinco de dúplica a las sucesivas contestaciones del presidente. A Rajoy le seguirán los demás portavoces de los grupos, de menor a mayor: CiU, ERC, PNV y también IU-ICV en función de la hora. A ellos también les irá respondiendo Rodríguez Zapatero, con igual distribución de tiempos, prolongando el debate hasta bien entrada la noche, cuando se suspenderá para continuar el jueves por la mañana con las intervenciones de los restantes grupos, con el socialista al final.

Curiosamente, los grupos parlamentarios han anticipado los principales argumentos que llevarán a la tribuna del Congreso, entre los que destaca el modelo de Estado, la financiación autonómica, la lucha contra el terrorismo y la situación económica. Las propuestas de resolución presentadas por los grupos no se votarán hasta la semana que viene, ya que este año se ha abierto un plazo más amplio para registrar las propuestas –hasta el viernes por la tarde– y para presentar enmiendas –hasta el lunes. De esta manera, las fuerzas políticas dispondrán de más tiempo para consensuar las resoluciones, que se votarán el próximo martes.
 
La situación del País Vasco se verá salpicada por la polémica creada por la no ilegalización del Partido Comunista de las Tierras Vascas (herederos de Batasuna-ETA). El PP tiene intención de presentar una resolución que inste al Gobierno a actuar de inmediato contra los batasunos, que ningún otro partido está dispuesto a apoyar.
 
El portavoz parlamentario socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, aseguró que el PSOE no ha decidido si presentará una resolución específica sobre este asunto, algo que hará tras escuchar a Rajoy. IU sí pedirá la superación del actual Pacto y la creación de un nuevo acuerdo multilateral entre todos los partidos políticos. El coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, ha dicho que será muy crítico con la gestión de Zapatero. Llamazares aseguró que el Gobierno "se ha dormido en los laureles" y le exigirá un giro a la izquierda en materia de política social y medioambiental y un liderazgo más fuerte en el desarrollo federal del modelo de Estado.
 
ERC, el otro gran socio parlamentario del Ejecutivo, buscar reforzar su alianza con los socialistas. Joan Tardá, portavoz republicano en el Congreso, aseguró que su partido parte con la idea de reforzar la apuesta por el Gobierno de Zapatero y tenderán la mano "esta vez más larga" con el convencimiento de que "no van a morderla". Uno de los objetivos del PSOE en este debate es, precisamente, mostrar la estabilidad del Gobierno y para eso deberá contentar a ERC y a IU.

El presidente del Congreso, Manuel Marín, que también debuta en estas lides, se comprometió a dirigirlo "con cintura política", aún admitiendo que se trata de un debate difícil. Cada portavoz contará con un tiempo máximo de 45 minutos que Marín considera suficientemente "amplio y generoso".

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