Maragall augura una España que "como dijo un compañero, no la conocerá ni la madre que la parió"

L D (Agencias) El candidato del PSC a la Generalitat, Pasqual Maragall, y el presidente castellano-manchego, José Bono, han expresado su coincidencia "al cien por cien" en la defensa de la España plural al estimar que solo los "inquisidores" se sienten "empobrecidos" por la pluralidad.

Maragall y Bono mostraron estas coincidencias en una visita, junto al alcalde de Barcelona, Joan Clos, a las obras de los edificios donde se celebrará el Foro de las Culturas del 2004. Según el líder del PSC, pronto se podrá dibujar, con Cataluña "al frente", un país "que como bien ha dicho un compañero nuestro no lo va a conocer ni la madre que lo parió", en referencia a la frase de Alfonso Guerra tras la victoria socialista en las elecciones de 1982. Maragall entiende que "España será grande si es plural y está bien conectada".

La teoría de la bicapitalidad de España, según Maragall, se basa en que Barcelona sea la capital de la Europa del sur, orientada hacia Europa, Madrid se dedique más a mirar hacia América. Con esto, en la versión del líder socialista catalán, se convierte a las dos ciudades en una "locomotora" que conduzca al resto de España.

Por su parte, el presidente de Castilla La Mancha, José Bono lamentó que Aznar ha hecho, en sus ocho años de Gobierno, "un muy mal servicio" a la "vertebración" de España ya que "ha utilizado en provecho propio y electoral" los símbolos españoles. Explicó que "España no es algo que nos tiene, sino algo que tenemos. No es algo irremediable y trágicamente hecho por el destino de la historia. Es algo que hacemos nosotros. España no es algo que nos impide, ya que esto sería una madrastra, sino una madre, algo que nos permite". En este sentido, ha subrayado que la "evocación" de España "tiene que ser alegre, plural, diversa, democrática, y no puede ser rancia, antigua, folletinesca y triste". "Esto sería una versión nacionalista antigua y poco digna de aplauso".

Para suavizar sus diferencias con Maragall, en concreto respecto al Pan Hidrológico Nacional,
Bono, explicó que "si todos coincidiéramos a la voz de mando, no serían necesarias las autonomías, bastaría con el gobierno de Madrid, gobernado por los que creen que España empieza y acaba en el paseo de la Castellana. Estos son los peores separatistas y separadores". Tras estas palabras, Maragall dijo que la "definición" de España que hecha por su compañero le parecía "perfectamente válida". "La suscribo al cien por cien. No añadiría ni sacaría ni una coma porque me parece perfecta".