(Libertad Digital) Tal como publica El Mundo, es recordado por sus compañeros como "un gran profesional" que dedicó un "gran sacrificio personal" a combatir la lacra que asola su pueblo. Puelles era ya un conocido de ETA desde los 90, debido a su trayectoria en la lucha antiterrorista. Su nombre aparecía, ya en esas fechas, en los documentos intervenidos a la banda terrorista.
Un agente "de toda la vida" que, además, iba a alcanzar una gran importancia en la lucha criminal contra la banda. Como publica el diario, era uno de los más veteranos y a base de profesionalidad ascendió en la escala policial hasta su penúltima promoción: ya había hecho los exámenes policiales para inspector jefe.
En su hoja de servicios queda, según El Mundo, desde la desarticulación del grupo Vizcaya hasta varias infraestructuras de captación de la banda terrorista y los grupos responsables de organizar el terrorismo callejero. En 2003 colaboró en la desarticulación de casi totalidad del llamado "aparato de captación" de ETA en País Vasco y Navarra, donde se detuvieron a dos decenas de personas y se incautó gran cantidad de documentos. También estuvo en la desarticulación del grupo Vizcaya en Puerto de Urkiola.
Apodado "el Rata" por sus propios compañeros, estaba ahora al frente de uno de los grupos más especializados de la Brigada Provincial de Información de Vizcaya, dedicado al seguimiento y vigilancia terrorista.