LD (EFE) Un total de 27 países de los 35 que integran la ejecutiva de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) votaron a favor, mientras que cinco se abstuvieron y tres votaron en contra de la resolución que envía al Consejo de Seguridad de la ONU para su debate y análisis, el polémico programa nuclear de Irán.
La resolución remite el caso iraní al órgano máximo de la ONU pero no amenaza con sanciones. El texto expone una serie de exigencias a Irán, como volver a suspender su programa de enriquecimiento de uranio y ser más transparente, tal y como lo solicita el director general de la AIEA, Mohamed El Baradei.
Tras informarse de la resolución, el jefe de la delegación iraní, Javad Vaeidi, anunciaba que su país reanudaba su programa de enriquecimiento de uranio a pleno rendimiento. Un portavoz de la AIEA informó de que los países que se abstuvieron fueron Argelia, Sudáfrica, Indonesia, Libia y Bielorrusia, mientras que Cuba, Venezuela y Siria votaron en contra de la resolución. Inmediatadamente después,
La decisión final sobre el caso iraní había sido aplazada hasta este sábado debido a una disputa entre EEUU y Egipto, ya que el país árabe quería incluir en la resolución un llamamiento a la creación de una zona libre de armas nucleares en Oriente Medio, una alusión indirecta a Israel, país sospechoso de tener un arsenal atómico.
El nuevo texto menciona ahora como objetivo un Oriente Medio "libre de armas de destrucción masiva". De esa forma se evita destacar indirectamente a Israel, ya que se sospecha que otros países de la región, como por ejemplo Siria, disponen de arsenales biológicos o químicos.