LD (EFE) El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, dice que no cree "necesario abordar procesos de regularización en el futuro porque hay un proceso ordenado, con contratación en origen, y un sistema que permite a las personas que viven en España de forma irregular, si tienen arraigo social durante un tiempo y reciben una oferta de empleo, obtener su regularización. Con esto es suficiente", explica Caldera en una entrevista que este domingo publica El País.
"Nuestra cooperación con el África subsahariana nos está facilitando una ordenación de los flujos migratorios. Sólo hay que ver la caída extraordinaria del número de cayucos", indica Caldera.
Los inmigrantes en cayucos siguen arriesgando su vida por llegar a España
A pesar de las declaraciones del ministro, la llegada de cayucos no cesa. Un total de 49 subsaharianos indocumentados, entre ellos siete menores de edad, llegaron este sábado al puerto tinerfeño de Los Cristianos, al sur de la isla, según fuentes de la Delegación del Gobierno de Canarias.
El cayuco en el que viajaban los inmigrantes fue localizado por una embarcación de Salvamento Marítimo cuando se encontraba a una milla de la isla, y tuvo que ser remolcado hasta el citado puerto, en el municipio de Arona, adonde arribó.
El cayuco en el que viajaban los inmigrantes fue localizado por una embarcación de Salvamento Marítimo cuando se encontraba a una milla de la isla, y tuvo que ser remolcado hasta el citado puerto, en el municipio de Arona, adonde arribó.
Los derechos universales
En cuanto al compromiso del Gobierno de aportar 2.500 euros por hijo, el ministro indica que la medida "en principio debe ser permanente y universal. Los derechos avanzan si son universales", precisa.
Añade que "es progresista extender y desarrollar derechos universales. Me suenan a demagogia hueca algunas cosas que escucho: que extender esta ayuda supone no hacer justicia social. En España las personas con más renta contribuyen más por la vía fiscal" y añade que "todos los niños han de considerarse igual. Así lo hacen Francia y Alemania".
En cuanto al compromiso del Gobierno de aportar 2.500 euros por hijo, el ministro indica que la medida "en principio debe ser permanente y universal. Los derechos avanzan si son universales", precisa.
Añade que "es progresista extender y desarrollar derechos universales. Me suenan a demagogia hueca algunas cosas que escucho: que extender esta ayuda supone no hacer justicia social. En España las personas con más renta contribuyen más por la vía fiscal" y añade que "todos los niños han de considerarse igual. Así lo hacen Francia y Alemania".
Coordinador del programa electoral de PSOE
Como coordinador del programa electoral del PSOE Caldera asegura que "no se ha tocado techo" en materia social, y añade que "habrá muchas otras iniciativas".
"Mi idea, y el presidente del Gobierno la comparte, -señala- es que el programa tenga un profundo compromiso social, por ejemplo con la extensión de la red de escuelas infantiles para niños de cero a tres años". Sobre el tema, Caldera se muestra orgulloso porque "había un 12 por ciento de cobertura, cuando llegamos al Gobierno, hoy hay un 26 por ciento. De cada 100 niños, 26 tienen plaza".
"Nuestro gran compromiso será plantear a las administraciones públicas un acuerdo para universalizar esa asistencia. Lo que pasa es que es un objetivo muy ambicioso que nos llevará unos años desarrollar. Pero debe ser el objetivo de la próxima legislatura".