L D (Agencias) La ministra de Exteriores ecuatoriana María Isabel Salvador informó en el Palacio Presidencial de que la medida se adoptó "al no quedar otro recurso, y después de siete años de esfuerzos diplomáticos infructuosos y frustrantes" para solicitar a Colombia el cese de esas aspersiones.
El anuncio de Salvador se produjo dos días después de que el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, dijese que hoy emprendería una contraofensiva diplomática a lo que calificó de "abusos" e "insolencias" por parte de Colombia, por la operación antiterrorista colombiana contra un campamento de las FARC el 1 de marzo en territorio ecuatoriano.
Correa había advertido que daría "una respuesta concreta a todos los abusos que hemos recibido de Colombia, no sólo por la incursión del 1 de marzo, sino en los últimos años". El llamado "informe blanco" sobre la demanda de Ecuador contra Colombia por las fumigaciones aéreas, asegura que la proximidad entre esta acción y la reciente denuncia ecuatoriana sobre la violación de su espacio territorial en la Organización de Estados Americanos (OEA) y en el Grupo de Río es "absolutamente fortuita".
Con la demanda, cuya redacción comenzó en 2007, Quito busca una declaración de la Corte Internacional de Justicia de que "Colombia ha violado la soberanía y la integridad territorial de Ecuador". Asimismo, una "orden" para que Bogotá se abstenga de realizar fumigaciones con el herbicida glifosato a menos de diez kilómetros de la frontera y para que "pague reparaciones a Ecuador por el daño causado por las aspersiones ilegales".
Las autoridades colombianas, que aseguran que estas fumigaciones contra los cultivos de coca son inocuas para la salud, las mantienen suspendidas a petición de Ecuador desde comienzos de 2007. En su declaración leída, la canciller reiteró el "firme compromiso de Ecuador de resolver toda disputa internacional pacíficamente y en concordancia con el derecho internacional". Salvador recalcó que la demanda se presentó porque "Ecuador tiene pruebas contundentes" de que las aspersiones colombianas contra los cultivos de coca "traspasaron la frontera" y afectaron "seriamente" la salud y economía de numerosos ciudadanos ecuatorianos.
Desde 2000, cuando comenzaron las fumigaciones, Ecuador ha pedido su cese, pero "al no quedar otro recurso, y después de siete años de esfuerzos diplomáticos infructuosos y frustrantes, Ecuador presentó una demanda" ante la Corte de La Haya, dijo la ministra.
El anuncio de Salvador se produjo dos días después de que el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, dijese que hoy emprendería una contraofensiva diplomática a lo que calificó de "abusos" e "insolencias" por parte de Colombia, por la operación antiterrorista colombiana contra un campamento de las FARC el 1 de marzo en territorio ecuatoriano.
Correa había advertido que daría "una respuesta concreta a todos los abusos que hemos recibido de Colombia, no sólo por la incursión del 1 de marzo, sino en los últimos años". El llamado "informe blanco" sobre la demanda de Ecuador contra Colombia por las fumigaciones aéreas, asegura que la proximidad entre esta acción y la reciente denuncia ecuatoriana sobre la violación de su espacio territorial en la Organización de Estados Americanos (OEA) y en el Grupo de Río es "absolutamente fortuita".
Con la demanda, cuya redacción comenzó en 2007, Quito busca una declaración de la Corte Internacional de Justicia de que "Colombia ha violado la soberanía y la integridad territorial de Ecuador". Asimismo, una "orden" para que Bogotá se abstenga de realizar fumigaciones con el herbicida glifosato a menos de diez kilómetros de la frontera y para que "pague reparaciones a Ecuador por el daño causado por las aspersiones ilegales".
Las autoridades colombianas, que aseguran que estas fumigaciones contra los cultivos de coca son inocuas para la salud, las mantienen suspendidas a petición de Ecuador desde comienzos de 2007. En su declaración leída, la canciller reiteró el "firme compromiso de Ecuador de resolver toda disputa internacional pacíficamente y en concordancia con el derecho internacional". Salvador recalcó que la demanda se presentó porque "Ecuador tiene pruebas contundentes" de que las aspersiones colombianas contra los cultivos de coca "traspasaron la frontera" y afectaron "seriamente" la salud y economía de numerosos ciudadanos ecuatorianos.
Desde 2000, cuando comenzaron las fumigaciones, Ecuador ha pedido su cese, pero "al no quedar otro recurso, y después de siete años de esfuerzos diplomáticos infructuosos y frustrantes, Ecuador presentó una demanda" ante la Corte de La Haya, dijo la ministra.
La canciller no confirmó informaciones de la prensa local sobre una eventual gira de Correa por varios países europeos para explicar la posición ecuatoriana en la crisis con Colombia. Quito mantiene rotas las relaciones diplomáticas con Bogotá por la violación a su territorio en la operación antiterrorista colombiana contra las FARC del pasado 1 de marzo.
El pasado sábado, Correa amenazó con retirar a la fuerza militar de la frontera con Colombia si el Gobierno de Bogotá persiste en el supuesto ataque mediático contra el Ejecutivo de Quito. El vicepresidente de Ecuador, Lenín Moreno, indicó hoy que la retirada de las tropas es "un punto extremo al cual se llegaría en el supuesto de que el Gobierno colombiano decida mantenerse en su posición guerrerista".
El pasado sábado, Correa amenazó con retirar a la fuerza militar de la frontera con Colombia si el Gobierno de Bogotá persiste en el supuesto ataque mediático contra el Ejecutivo de Quito. El vicepresidente de Ecuador, Lenín Moreno, indicó hoy que la retirada de las tropas es "un punto extremo al cual se llegaría en el supuesto de que el Gobierno colombiano decida mantenerse en su posición guerrerista".
Un helicóptero ecuatoriano violó espacio aéreo colombiano
Horas después de que Ecuador presentase su denuncia en La Haya, el gobierno colombiano denunciaba que un helicóptero militar de Ecuador violó el domingo el espacio aéreo de Colombia, fue obligado a aterrizar y evadió luego a las aeronaves de este país que lo escoltaban hacia el puerto suroccidental de Tumaco.
El helicóptero ecuatoriano estaba ocupado por cuatro militares, precisó la Casa de Nariño, sede del Ejecutivo colombiano, e indicó que el responsable de la operación de interceptación decidió que se cancelara "cualquier procedimiento" contra el aparato.
El incidente comenzó hacia las 11.10 locales del domingo (16.10 GMT), con el avistamiento en el espacio aéreo colombiano del helicóptero del ejército ecuatoriano, del tipo Gazella y matrícula 316, informó el palacio gubernamental en un comunicado leído a la prensa por el portavoz del Ejecutivo, César Mauricio Velásquez.
La aeronave la ocupaban dos tripulantes y dos pasajeros, "todos con uniforme militar de las Fuerzas Armadas ecuatorianas", según la nota, que no precisó el punto de la frontera común de 586 kilómetros por el que el aparato entró a territorio colombiano, aunque, al parecer, lo hizo por Nariño, departamento del que es capital Pasto. "Dos helicópteros Black Hawk del ejército colombiano, que se encontraban en el área, trataron de establecer contacto radial con dicha aeronave, con resultados negativos", añadió el comunicado.
La aeronave ecuatoriana fue entonces obligada a aterrizar "en las coordenadas latitud 01 grados, 22 minutos, 69 segundos norte, y longitud 78 grados, 37 minutos, 79 segundos oeste", indicó luego. Según la nota, en tierra, los responsables de la interceptación "invitaron" a los ocupantes del aparato extranjero a "dirigirse al aeropuerto de la ciudad de Tumaco, que se encuentra a menos de 15 minutos de vuelo del lugar de aterrizaje antes indicado",
Asimismo, prosiguió, los colombianos les entregaron por escrito a los ecuatorianos "la frecuencia 118.1, a fin de mantener contacto directo" durante el trayecto hasta Tumaco, en la costa del Pacífico. Sin embargo, "una vez en el aire, el helicóptero ecuatoriano escoltado por los dos helicópteros colombianos, descendió sorpresivamente y emprendió vuelo rasante, con rumbo sur, incumpliendo las instrucciones dadas por las autoridades colombianas", según la nota del Ejecutivo en Bogotá.
El comunicado dijo que el comandante militar "decidió que se cancelara cualquier procedimiento en contra del helicóptero, por tratarse de una aeronave militar de las Fuerzas Aéreas ecuatorianas". El incidente fue informado a las autoridades militares en Quito, indicó el Gobierno, que alentó a "la cooperación fraterna" entre Ecuador y Colombia "para dar cumplimiento a los acuerdos de la Organización de Estados Americanos (OEA)".
El incidente comenzó hacia las 11.10 locales del domingo (16.10 GMT), con el avistamiento en el espacio aéreo colombiano del helicóptero del ejército ecuatoriano, del tipo Gazella y matrícula 316, informó el palacio gubernamental en un comunicado leído a la prensa por el portavoz del Ejecutivo, César Mauricio Velásquez.
La aeronave la ocupaban dos tripulantes y dos pasajeros, "todos con uniforme militar de las Fuerzas Armadas ecuatorianas", según la nota, que no precisó el punto de la frontera común de 586 kilómetros por el que el aparato entró a territorio colombiano, aunque, al parecer, lo hizo por Nariño, departamento del que es capital Pasto. "Dos helicópteros Black Hawk del ejército colombiano, que se encontraban en el área, trataron de establecer contacto radial con dicha aeronave, con resultados negativos", añadió el comunicado.
La aeronave ecuatoriana fue entonces obligada a aterrizar "en las coordenadas latitud 01 grados, 22 minutos, 69 segundos norte, y longitud 78 grados, 37 minutos, 79 segundos oeste", indicó luego. Según la nota, en tierra, los responsables de la interceptación "invitaron" a los ocupantes del aparato extranjero a "dirigirse al aeropuerto de la ciudad de Tumaco, que se encuentra a menos de 15 minutos de vuelo del lugar de aterrizaje antes indicado",
Asimismo, prosiguió, los colombianos les entregaron por escrito a los ecuatorianos "la frecuencia 118.1, a fin de mantener contacto directo" durante el trayecto hasta Tumaco, en la costa del Pacífico. Sin embargo, "una vez en el aire, el helicóptero ecuatoriano escoltado por los dos helicópteros colombianos, descendió sorpresivamente y emprendió vuelo rasante, con rumbo sur, incumpliendo las instrucciones dadas por las autoridades colombianas", según la nota del Ejecutivo en Bogotá.
El comunicado dijo que el comandante militar "decidió que se cancelara cualquier procedimiento en contra del helicóptero, por tratarse de una aeronave militar de las Fuerzas Aéreas ecuatorianas". El incidente fue informado a las autoridades militares en Quito, indicó el Gobierno, que alentó a "la cooperación fraterna" entre Ecuador y Colombia "para dar cumplimiento a los acuerdos de la Organización de Estados Americanos (OEA)".