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Bermejo propone los inhibidores del deseo sexual como solución para los pederastas

El asesinato de la niña Mari Luz Cortés y las últimas detenciones por pornografía infantil a través de Internet han creado una gran alarma social en España. Por ello, el ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, ha asegurado que es partidario del uso de medicamentos inhibidores del deseo sexual para pederastas no rehabilitados para evitar casos como el de la niña de Huelva. Sin embargo, ha evitado referirse a los problemas judiciales que provocaron la cadena de errores en este caso. La "justicia digital", su solución.

El asesinato de la niña Mari Luz Cortés y las últimas detenciones por pornografía infantil a través de Internet han creado una gran alarma social en España. Por ello, el ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, ha asegurado que es partidario del uso de medicamentos inhibidores del deseo sexual para pederastas no rehabilitados para evitar casos como el de la niña de Huelva. Sin embargo, ha evitado referirse a los problemas judiciales que provocaron la cadena de errores en este caso. La "justicia digital", su solución.
LD (Europa Press) El ministro de Justicia se ha mostrado partidario del uso de medicamentos inhibidores del deseo sexual para pederastas cuya rehabilitación no esté asegurada. Estas empiezan a ser algunas de las primeras medidas tomadas por la Administración para evitar casos similares al de Mari Luz Cortés. Sin embargo, este sólo debería ser el comienzo puesto que el presunto asesino de la niña onubense tenía pendientes varias sentencias judiciales. Y esta es la materia pendiente.
 
De este modo, Bermejo ha asegurado que el proyecto de ley que prepara y que será presentado el próximo otoño establecerá "posibilidades para que los profesionales puedan aplicar el tratamiento que convenga". En este sentido, explicó que no le gusta "hablar de castración química porque induce a error" aunque defendió la existencia de "medicamentos que inhiben el deseo sexual y funcionan para algunas personas".
 
Para luchar contra los delincuentes sexuales opinó que habrá que estudiar si "hay que elevar las penas; afinar el sistema para que no salga nadie de prisión hasta el último día, si no tiene un buen pronóstico; y que cuando no haya ese pronóstico, se contemple la prolongación del control después de la liberación". Sin embargo, el ministro reconoció que la Justicia española "tiene un problema grave de lentitud endémica" aunque no una "parálisis". A su juicio, la solución pasa por llegar a "la justicia digital" y anunció que el presupuesto de Justicia "va a aumentar significativamente en 2009".

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