Menú
Alberto Míguez

El retiro nipón de Fujimori

Se dijo que, finalmente, ni Fujimori ni Chávez asistirían a la X Cumbre de Panamá y el desconsuelo entre periodistas y público en general era palpable. Junto con Castro constituyen la mayor atracción en este modesto espectáculo. Pero, albricias, el trío estará presente.

Castro llegará en la madrugada del jueves al viernes, aunque nadie sabe a qué hora ni en qué aeropuerto. Ni siquiera se sabe en qué hotel dormirá o en qué automóvil se trasladará. Tiene más miedo que el gato al agua, pese a que las medidas de seguridad son muy estrictas en Panamá y hasta aquí se desplazaron varios cientos de policías y soldados cubanos para velar por la salud del líder máximo.

Chávez vivaquea por el istmo centroamericano con la espada de Bolívar a cuestas. Pero asistirá, también, a la Cumbre porque quiere ilustrar a sus pares sobre el ejército bolivariano a cuya comandancia aspira.

En cuanto a Fujimori, antes de poner el pie en suelo panameño habrá completado una gira sospechosa por Brunei, Singapur y Tokio. Nadie sabe por que “el Chino” se desvió hasta Japón antes de atravesar el Pacífico y aterrizar cerca del Canal de Panamá. Hay opiniones para todos los gustos, pero casi todas coinciden en que prepara sus maletas en Lima y sus cuarteles de invierno en Japón. Por lo que pueda ocurrir el domingo, cuando llegue a su país donde le espera una verbena política complicada.

Primeramente se dijo que había intentado asilarse en Malasia. Pero el gobierno de Kuala Lumpur lo desmintió con presteza. Se dijo también que había pedido ayuda al sultán de Brunei –el hombre más rico del mundo– para instalarse en la isla de Borneo y dedicarse a la contemplación de los orangutanes en los próximos años. Falso de toda falsedad.

Ahora sabemos que Fujimori hizo una escala más o menos técnica en Tokio para ver a su cuñado, Santiago Shinto, “nikei” como él y embajador de Perú en Japón. Y que tal vez le pidió a su hermana Rosa que le prepare un pisito de soltero en el barrio de Ginza, el más “chic” de la capital. Nada de todo esto le impedirá participar en la Cumbre panameña. Aunque ante las cámaras resulta poco expresivo, el espectáculo está asegurado.

En Internacional

    0
    comentarios