El asunto empezó a abordarse en noviembre del pasado año cuando la jefa del PDS acababa de ser elegida. Una de sus primeras tareas fue encargar a una comisión especial la redacción de una declaración en la que el partido de los ex comunistas de la antigua Alemania Oriental, los herederos del SED, tomaba postura ante la celebración, el próximo 13 de agosto, del XL aniversario de la construcción del muro de Berlín.
La idea era presentar el escrito el 2 de julio. Lo que no se sabía entonces, era que el grave déficit que sufren las arcas de Berlín y que saldría a la luz unos meses después iba a desencadenar una crisis política que, entre tanto, ha provocado la destitución del alcalde gobernador de Berlín, Diepgen (CDU), la formación de un gobierno de transición liderado por el SPD, la convocatoria de elecciones anticipadas para principios de otoño y, sobre todo y lo más relevante para el PDS, las nuevas posibilidades que se les abren a los ex comunistas de gobernar con los socialdemócratas. Ahora, la nueva situación política obliga al partido a redefinirse y el aniversario de la construcción del muro ofrece el aliciente ideal para sentar nuevos postulados de cara a las anticipadas de otoño.
Pues bien, la declaración, que marca un hito en la historia del partido, se conoce desde el lunes: “Lamentamos la injusticia de la que el antiguo partido SED es responsable. Ningún estado tiene derecho a obligar a sus ciudadanos a vivir en él. No existe ideal ni meta superior alguna que justifique políticamente la injusticia cometida con el muro que causó la limitación sistemática de la libertad de domiciliación y significó una amenaza para la libertad individual, así como para la integridad física y la vida de los que intentaron abandonar el país”.
El texto fue aprobado con sólo un voto en contra. Según un portavoz del partido, el contenido del escrito puede ser interpretado como una disculpa oficial. No obstante, la palabra “perdón” por las muertes, el trato inhumano y la represión sufridos por todo un pueblo durante tres décadas, no figura en ninguna de sus líneas. No ha sido un despiste. Gregor Gysi, el candidato que encabeza la lista del PDS en las anticipadas, ha matizado que considera que el PDS sólo se debe explicaciones de caracter histórico a sí mismo. Según él, hasta aquí llega la confrontación de su partido con su pasado y, a partir de ahora, el PDS tiene la obligación de concentrarse en el futuro.
Se olvida el Sr. Gysi de que el futuro se construye sobre los cimientos del pasado. Sus actuaciones en público están despertando el miedo anticomunista que parecía olvidado.
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