Deberían ponerse de acuerdo. Laurent Fabius, ministro de Economía, repite tajantemente que el gobierno socialista ha creado dos millones de empleos en 5 años, cosa jamás vista en Francia desde finales del siglo XIX. Ocurre que jamás hubo tanto paro como durante el “reinado” de Mitterand, todavía linda el 10% de la población activa y ha vuelto a aumentar desde hace 10 meses. Siempre porque Lionel Jospin, en su declaración oficial de candidatura, da la cifra de 900.000 nuevos empleos, y su director de campaña, Jean Glavany, habla de un millón, lo cual, teniendo en cuenta lo mentiroso que es este señor resulta una exageración moderada.
También nos marea la prensa francesa con los “ejes”. Habría un “eje” Blair/Berlusconi, y otro eje Blair/Schröder. En realidad, el primer “eje” no es más que la decisión de Blair y Berlusconi de apoyar las propuestas “liberales” de Aznar sobre Europa. Pero aquí no se habla de Aznar, no existe, pero el desprecio va más allá de la persona de nuestro presidente de Gobierno, y ahora de la UE, es España lo que desprecian. En cuanto a las opiniones del británico y del alemán sobre el papel político fundamental de los gobiernos frente a la Comisión, que tanto irritan a Prodi y algunos comisarios, me parece dignas de ser tenidas en cuenta, mientras dicha Comisión no sea elegida, sino sus miembros designados a dedo, precisamente por los gobiernos europeos.
Los precios han aumentado en un 0,5%. Los culpables serían el frío y el euro. Lo del frío me parece argumento folclórico, como todo lo que se dice sobre el clima actualmente, y en cuanto al paso al euro, algunos nos temíamos un redondeo mucho mayor, no del 0,5 sino del 5% y hasta del 10, en ciertos casos. Peor es el tabaco, que el gobierno ha aumentado de un 10%, y los taxis, por ejemplo, que han redondeado a sus anchas. A propósito de taxis, como el Sena ha crecido y cubierto las famosas voies su berge, o autovías a orillas del río, el tráfico se ha hecho infernal. Circulan demasiados coches por París y los transportes públicos son una catástrofe. Como hay demasiados coches, los autobuses circulan a ritmo lento, y el metro se ha convertido en aventura peligrosa. Los “incidentes” se multiplican, como las huelgas por sorpresa y hasta los problemas técnicos. Este martes, toda la red se inmovilizó debido a un apagón, tan eléctrico como misterioso, ¡durante media hora! ¿Ustedes se creen que el gobierno o siquiera la Alcaldía buscan soluciones? Ni pensarlo. Desde las ventanas de sus ministerios, Jospin y Fabius se frotan alegremente las manos, cuantos más atascos, más despilfarro de gasolina, y cuanto más despilfarro, más dinero en las arcas del Estado, pues en ellas desemboca el 80% de lo que se paga por la gasolina. Ustedes dirán.
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