Simbología de los Reyes Magos

En torno a las fiestas navideñas son muchas las palabras oscuras que deben ser descifradas. Hemos visto las referentes a la Navidad y a la Nochevieja. El 6 de enero es la fiesta de la Epifanía, los populares Reyes Magos. Epifanía en griego quiere decir "aparición, manifestación de alguna persona significada que se hace visible". En principio, es la celebración de que el Niño Jesús se manifiesta o se hace visible a los Magos, quienes no eran reyes sino sabios, adivinos o astrólogos. Los tres Magos provenían de tierras lejanas. La idea primordial es que Jesús se manifestaba también a los gentiles o paganos, a los que no eran judíos. Antes, Jesús se había manifestado a los judíos, representados por los pastores. Está muy bien la simbología de los nacimientos o belenes que mezclan a los pastores con los Reyes Magos en el mismo decorado. Y está muy bien que "las Navidades", en general, duren desde el 24 de diciembre al 6 de enero. También se dice, en plural, "Felices Pascuas", porque "pascua" es cualquier fiesta solemne. Fundamentalmente hay tres en el año: Navidad, Epifanía y Resurrección.

Una tradición popular es que durante las Navidades los animales domésticos adquieren el privilegio de poder hablar. Por eso tiene sentido poner en los belenes el burro y el buey en amable compañía con la Sagrada Familia, los pastores y los Reyes Magos.

La tradición de los regalos que traen los Reyes Magos a los niños es específicamente española. No obstante, no es una tradición antigua. Prácticamente, es sólo del siglo XIX y casi podríamos decir de forma generalizada, ya del siglo XX. La tendencia actual de trasladar los regalos a la Nochebuena es más coherente con lo que ha sucedido en el resto de los países cristianos.

La tradición del roscón o "tortell" es común a otros países latinos, incluso con el símbolo de haba que se esconde en la masa del roscón. Antes, el que encontraba el haba tenía buena suerte y hoy le toca pagar el roscón del año siguiente. El haba es el símbolo de la sucesión de la vida y de la muerte. En lugar del haba (símbolo más bien pagano) podía esconder una figurita de barro o porcelana que representaba un pez. En griego, "pez" es ijzus. Esas letras son las iniciales de la frase Iesus Jristo´s Zeú Uio´s Soter (= Jesús Cristo, Hijo de Dios, Salvador). Es lo que se llama un acróstico. Ahora, en los roscones españoles se añaden otras figuritas que no son peces, pero eso es romper la tradición.

La máxima secularización del ciclo navideño está representada por la institución comercial de las "rebajas". Antes irrumpían el 7 de enero, pero con el tiempo se han ido adelantando a los anteriores días navideños.

Hay un símbolo pagano y cristiano asociado al ciclo navideño: la "estrella". Es la que guía a los Reyes Magos, que eran astrólogos (= estudiosos de los astros), para llegar hasta Belén. En la España actual se ha intentado eliminar oficialmente los símbolos religiosos de la decoración navideña de las ciudades, pero persiste la estrella. En el fondo, subsiste el respeto telúrico por los "astros". No olvidemos que "desastre" equivale a una gran desgracia, y "desastrado" es el tipo que va mal vestido. Los famosos son "estrellas". Tener "buena estrella" es tener buena suerte.

La estrella de los Reyes Magos suele ser de cinco puntas o de ocho puntas, algo exótico, lejos de la estrella de David (de seis puntas). En la iconografía cristiana la estrella de los Reyes Magos se representa como una cometa, lo que acentúa el símbolo de lo astrológico.