DOS AÑOS DESPUÉS DE LA SENTENCIA DEL SUPREMO
Rato tiene ahora en sus manos la decisión definitiva sobre las 79 emisoras del “antenicidio”
Dos años después de que el Supremo obligara al Grupo PRISA a deshacerse de las 79 emisoras de Antena 3 compradas ilegalmente, la Cadena SER sigue emitiendo su programación por esos postes. Ahora, la ejecución de la sentencia está en manos del Servicio de Defensa de la Competencia. Es decir, depende de Rodrigo Rato.
LIBERTAD DIGITAL, 14 de junio de 2002
Nacho García Mostazo
El domingo 9 de junio se cumplieron dos años desde que el Tribunal Supremo condenara al Grupo PRISA a deshacer la operación de compra de Antena 3 de Radio. Pese a que la sentencia era en firme, la empresa que preside Jesús de Polanco recurrió ante el Constitucional, que falló también en su contra el 26 de abril de 2001, hace más de un año. Sin embargo, el Gobierno no tuvo conocimiento del fallo del Constitucional hasta seis meses después. Esperó por “prudencia” a la decisión judicial, según dijo Pío Cabanillas, pero tanta fue la cautela que pasaron seis meses sin que nadie se enterara de lo que había pasado.
Finalmente, el Consejo de Ministros del pasado 2 de noviembre de 2001 ordenó la ejecución de la sentencia. Daba dos meses de plazo a PRISA para comunicar oficialmente cómo quería cumplir la sentencia del Supremo. Le permitía incluso diseñar la operación y que todo el procedimiento fuera secreto, a fin de no perjudicar al Grupo PRISA. La empresa presidida por Jesús Polanco tiene que deshacerse de 79 emisoras. Son los postes emisores que Antena 3 de Radio tenía en propiedad cuando fue absorbida por la Cadena SER entre 1992 y 1994, cuando el Gobierno de Felipe González aprobó la operación en una decisión que luego la Justicia ha demostrado que era contraria a derecho.
El trámite sigue su curso... secreto
En tiempo y forma, el Tribunal de Defensa de la Competencia y el Ministerio de Ciencia y Tecnología han recibido el documento de la Cadena SER (Grupo PRISA) donde comunica por escrito cómo quiere deshacerse de las citadas 79 emisoras. Desde el pasado mes de febrero, ambas instituciones se tomaron alrededor de dos meses para estudiar el informe y tomar sus decisiones. Tanto el TDC como Ciencia y Tecnología ya han elaborado sus dictámenes, según confirmó Libertad Digital de fuentes del TDC. Las mismas fuentes no explicaron cuál fue el sentido de la decisión, pero sí afirmaron que los dictámenes ya se habían enviado al Servicio de Defensa de la Competencia del Ministerio de Economía, donde se debe tomar la decisión definitiva una vez analizados los dos informes que ya obrarían en su poder.
Así lo decidió el Consejo de Ministros del pasado 2 de noviembre de 2001. El Ministerio de Economía tiene la última palabra, pero “no hay plazos”, según confirmaron fuentes del Departamento dirigido por Rodrigo Rato a Libertad Digital. Estas mismas fuentes no confirmaron que los dictámenes hayan llegado ya a Economía, pero reiteraron que el Consejo de Ministros no le exigía al Servicio de Defensa de la Competencia ningún plazo concreto para deshacer el “antenicidio”. Así pues, Rato tiene en su departamento la patata caliente y será él quien decida cuándo es el momento más adecuado para hacer pública la decisión.
Una decisión más política que económica
Pero más que una patata caliente, la operación podría interpretarse al contrario, porque Rato podría dilatar el procedimiento tanto como quiera en función de sus intereses o los del Gobierno. El ministro de Economía está en la carrera sucesoria, para la que podría necesitar del apoyo de los medios del Grupo PRISA, que ahora son conscientes de que no pueden –o no deben– publicar noticias que desgasten a Rato. También hay importantes intereses del Gobierno en juego. Simplemente mirando al horizonte más cercano, el 20-J hay convocada una huelga general, a fin de mes concluye la presidencia española de la UE y a mediados de julio se celebrará el debate sobre el Estado de la Nación, tres argumentos más que suficientes como para aguantar la decisión al menos hasta finales de julio.
La lógica dice que tampoco podría ser mucho más, ya que en septiembre se inicia la temporada radiofónica y se supone que la Cadena SER habrá pedido al Ejecutivo cierta celeridad, porque con 79 emisoras menos tiene que reorganizar su infraestructura y acostumbrar a sus oyentes a que busquen su programación favorita en otro punto del dial.
Consulte aquí las emisoras que fueron de Antena 3, en qué se convirtieron en 1993 y con qué indicativo emiten ahora:
Más información:
1. INFORME: Historia del "antenicidio"
2. DOCUMENTO: Antena 3, la SER, González, el TDC y LOCALIA TV
3. Cadena SER: de 265 postes a 414 (menos 79)