Sabido es que el caso ERE sigue su larga marcha, tanto en el juzgado de instrucción número 6 de Sevilla como en el Tribunal de Cuentas. También sigue en el Tribunal Supremo que tendrá que resolver sobre los recursos interpuestos por los condenados en la sentencia de la Audiencia Provincial de Sevilla de la que ya hace dos años. Pero que se haya anunciado que la sentencia decisiva del Supremo vaya a producirse en la primera mitad de 2022, año electoral seguro, convierte el fallo del TS en pieza de artillería política.
Por otra parte, el anuncio de las plataformas que se reúnen en España Vaciada de que están perfilando el proceso interno para competir con los demás partidos en las próximas elecciones andaluzas, convierte a esta opción en una novedad electoral que puede afectar a todos los partidos, especialmente los que disponen de influencia en la Andalucía rural y sus pequeños municipios y los que defienden el papel del campo andaluz.
Ha recordado Diario de Sevilla que este próximo viernes día 19 de noviembre hará dos años de la sentencia de la Audiencia de Sevilla que condenó a 19 ex altos cargos de la Junta, los ex presidentes socialistas Manuel Chaves y José Antonio Griñán entre ellos a diferentes penas desde ocho años de cárcel a muchos años de inhabilitación para el ejercicio de cargo público por los delitos de prevaricación y/o malversación de caudales públicos.
Y aporta después que el fallo definitivo del Tribunal Supremo sobre el mal uso de 680 millones de euros de dinero público andaluz, de los que se han perdido ya muchos según el Tribunal de Cuentas, se podrá conocer en el primer semestre de 2022, lo que significa que puede coincidir con una presunta convocatoria electoral o convertirse en uno de los ejes de la campaña.
Ante los recursos de los condenados, el Supremo puede hacer varias cosas. Puede aceptarlos en todo o en parte o puede confirmar la sentencia de la Audiencia de Sevilla que es lo que ya le ha pedido la Fiscalía del Tribunal. Puede incluso eliminar el delito de malversación de caudales y dejar sólo el de prevaricación, dejando la cárcel fuera del horizonte vital de muchos condenados, entre ellos José Antonio Griñán que, no se olvide, fue presidente nacional del PSOE como Manuel Chaves.
Lo mejor para el PSOE, el partido afectado, es que el fallo, que en cualquier caso conllevará condenas importantes, se haga público después de las elecciones, pero ello choca con sus intereses estratégicos de atrasar las elecciones lo más posible debido al escaso conocimiento de Juan Espadas entre los andaluces y no haberse producido aún la reorganización necesaria tras la salida de Susana Díaz.
Para los demás partidos, sobre todo para el PP y Vox, es que el fallo se conociera antes o durante la campaña electoral porque apuntalaría la opción de consolidar una ruta de cambio. En cualquier caso, el asunto de la sentencia se convertirá en argumento electoral relevante.
El segundo factor novedoso de la próxima campaña electoral será la presencia en las papeletas electorales de una nueva formación política, España Vaciada, que aún no tiene ni nombre concreto para su formalización legal. Al menos, según su representante Antonio Sanz en declaraciones a Europa Press, "estamos trabajando en esa fórmula de coaligarnos, dibujando escenarios para cualquier situación que se pudiera dar", especialmente en las comunidades de Castilla y León y Andalucía que pueden tener elecciones anticipadas.
La opción electoral de esta futura Andalucía vaciada es difícilmente valorable en cuanto al coste que podría suponer para otros partidos si es que finalmente prospera. Tanto el PSOE como el PP, pero mucho más el primero, tiene una gran presencia en la Andalucía rural donde domina más de 400 ayuntamientos. También puede afectar al comunismo rural anclado en torno a Teresa Rodríguez e igualmente a Vox que tiene un discurso claro de defensa de los intereses económicos y culturales del campo andaluz.
La tercera novedad podría ser una crisis agónica de Ciudadanos. Los llamados Renovadores hostiles al liderazgo de Juan Marín que se agrupan en torno a la figura de Carmen Almagro pueden exigir unas elecciones primarias para optar a la dirección del partido, primarias que, dada la incertidumbre electoral, ya deberían estar en el horizonte inmediato, cosa que no comparte Juan Marín.
Las aguas internas de Ciudadanos andan revueltas debido a la influencia evidente de Fran Hervías, el Lobo, ahora succionando activos para el PP en calidad de enemigo visceral de Marín y de la presencia en su seno de núcleos fieles a los principios fundacionales del primer Ciudadanos nacido en Cataluña.
El desmoronamiento electoral de la formación naranja, que ayer vio reducidos los 7 escaños que le dio el Barómetro Andaluz en septiembre a los 2/3 que le otorgaba ayer de NC Report pronostica que ni la izquierda ni el centro derecha podrán tenerlo en cuenta como apoyo relevante.