Colabora


Presente y pasado

Perspectivas (I). Rajoy por mayoría absoluta

Una victoria de Rajoy por mayoría absoluta es muy improbable, mas no imposible si los desmanes del equipo de Zapo se hacen lo bastante evidentes por sí mismos, a pesar de la complicidad de los medios y de la sordina puesta a aquellos por el Futurista y los suyos; a pesar, también, de que los futuristas no aspiran a una mayoría tal, sino a ganar por la mínima, con un poco de suerte. La crisis económica, si se agrava en estas semanas, puede influir a su vez.
No debe descartarse del todo, pues, esa posibilidad. Y en tal caso se plantearía qué política seguiría el PP. Muchos atribuyen la flojera, por así llamarla, de la oposición de Rajoy a una táctica deliberada para alcanzar el poder y, desde él, desplegar una acción más resuelta, derogando las acciones y leyes anticonstitucionales de Zapo y afrontando con claridad a separatistas y terroristas. Esta creencia suele acompañarse por la de que, en cualquier caso, las bases y votantes del PP presionarían a los dirigentes y les obligarían a obrar “como es debido”.
En mi opinión, se equivocan quienes así piensan. Es mucho más difícil presionar a un partido en el poder y lejos de nuevos comicios, que a un partido en la oposición y en vísperas electorales. Y tampoco creo que la política de la actual oposición sea una táctica ni responda a complejos, sino que refleja las ideas y modos de un grupo de políticos básicamente afines al PSOE, cuya línea siguen, algo atenuada. Los actos reales, prácticos, del PP a lo largo de esta legislatura revelan unos rasgos llamativos. Nunca ha sido capaz Rajoy de denunciar efectivamente la política del gobierno ni de situarla a la defensiva, de exponer la actuación de Zapo en Irak, oponiéndose primero al derrocamiento de Sadam y luego apoyando allí a los mismos terroristas que presuntamente atentaron en Madrid; nunca atacó de forma clara e inteligible para la población la inversión del Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo, ni la conversión del asesinato en un modo de hacer política y lograr enormes concesiones contra la Constitución y el derecho; ni las razones de Zapo para cometer tales fechorías; nunca defendió con la energía precisa a la AVT, ni la libertad de expresión constantemente asediada por la Infame Alianza, ni la independencia judicial; ni opuso un discurso coherente al matrimonio homosexual, a los ataques a la Iglesia o a la memoria histórica, ni marcó una política alternativa precisa. Siempre se ha movido dentro de las líneas marcadas por Zapo, y cualquier “salida de tono” quedaba rápidamente neutralizada.
A mi juicio estas conductas no obedecen a simple torpeza (aunque un partido capaz de entregar a sus adversarios el control de los medios de masas e incapaz de defender a los pocos medios que le apoyan ya revela un grado francamente excesivo de lo que en términos vulgares se llama gilipollez) ni tampoco obedecen a complejos: expresan lo que piensan –o no piensan– los futuristas. Así hemos llegado a una putrefacción acelerada del legado de la Transición, un legado con serios déficits, pero susceptibles de ser corregidos. En lugar de ello, en lugar de proponer una alternativa clara y alejarse de esa deriva, los futuristas la siguen, eso sí, protestando, tratando de frenar el ritmo de deterioro pero no el deterioro mismo, y dedicándose a convencernos de lo bien que presuntamente resolverán la crisis económica.
Lo he advertido en otro momento: ¿qué hará Rajoy en el poder, si lo alcanza, incluso por mayoría absoluta? Hará lo mismo que en la oposición. No puede cambiar de línea una vez logrado el gobierno, porque no tiene esa intención y porque, además, el cambio sería visto, y con razón, como un engaño o una estafa al electorado, que las izquierdas y separatistas sabrían explotar a fondo.

-----------

Patio de Monipodio

– Leguina, preocupado de que el PP pierda las elecciones: con el apoyo de Federico y de Pedro J. las perderá, seguro. Que pruebe a ganarlas sin ese apoyo y contra él... ¿quizá con el de Leguina?

– Contra lo que cree el club Monipodio, los obispos tienen pleno derecho a hablar de política o de lo que les plazca. El mismo derecho que el club, y mucha más autoridad moral. Al menos mientras persista algo de democracia en España.
– Los titiriteros, amigos de la ETA, de Sadam, de Castro, de los totalitarismos en general, están contra la Iglesia: ¿qué podría ser más demostrativo?
– Y repitamos la evidencia: a la ETA le conviene el triunfo de Zapo. A los islamistas (confesión de parte) les conviene el triunfo de Zapo. A los separatistas, a Mohamed VI, a Fidel Castro... les conviene el triunfo de Zapo.

Lo más popular

  1. Un documento certifica que el hermano de Sánchez atesora dos millones con sólo 273.000 euros en ingresos por su enchufe
  2. Vídeo: Elisa Vigil repasa en tres idiomas el ridículo internacional de Sánchez
  3. El PSOE prepara la primera querella contra un periodista tras la "limpieza" anunciada por Sánchez
  4. La "directiva del desayuno" europea que España está obligada a aplicar en dos años
  5. Vox se persona contra Begoña Gómez con nueva documentación y advierte de que llegará "hasta las últimas consecuencias"

Ver los comentarios Ocultar los comentarios

Portada

Suscríbete a nuestro boletín diario