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(01-08-03) Los dueños del Prestige no quieren extraer el fuel

Los propietarios del Prestige trataron de evitar que se extrajera el combustible del buque hundido alegando que "no merecía la pena" invertir en un trabajo a esa profundidad pero, sin embargo, advirtieron a las autoridades españolas que recordasen quiénes son los dueños del fuel si llegaban a extraerlo, según informó este jueves Fomento.

L D (EFE) El sellado del casco partido del Prestige quedará finalizado a mediados de agosto, después de que se cierren las grietas de la popa del barco, según explicaron este jueves los técnicos de la operación, que se mostraron optimistas en cuanto al éxito de las futuras labores de extracción de fuel.

El subsecretario del Ministerio de Fomento, Adolfo Menéndez, visitó el "Polar Prince", buque que sirve de soporte a los trabajos técnicos que se llevan a cabo en el precio, y que permanecerá atracado en el puerto de Vigo hasta el sábado. Ese mismo día, la nave zarpará hacia la zona del hundimiento, a la que tiene previsto llegar el domingo.

En una conferencia de prensa, Menéndez recordó que la proa del pecio, que contiene más del 90 por ciento del fuel, está sellada, y que cuando el "Polar Prince" vuelva a la zona del hundimiento se iniciarán los trabajos en la popa. Asimismo, destacó que la Administración central "está siendo pionera" con esta actuación, porque hasta ahora "se abandonaban los pecios en profundidad".

Indicó que cada día salen 350 kilos de combustible del barco, según sus estimaciones, y precisó que será ese fuel "móvil" el que se extraiga, puesto que el que permanece pegado al interior del casco "no constituye riesgo alguno", ya que no podrá salir.

Se prevé que la popa quede sellada durante la primera quincena de agosto y que, a finales de ese mes o comienzos de septiembre, se realicen las pruebas piloto de extracción por gravedad. La extracción con bolsas se pospondría hasta primavera del año que viene, según explicó el comisionado del Ministerio de Fomento para el "Prestige", Francisco Alonso, por las dificultades que supondría realizar esta operación bajo las condiciones climatológicas del invierno, que incrementarían el riesgo de perder fuel.

Ramón Hernán explicó que, en caso de que no funcionase el sistema de bolsas, se construirá una marquesina de metal, con columnas apoyadas a ambos lados del pecio, para que realice las funciones de confinamiento y extracción del combustible. Así, una vez instalada la marquesina, se podría abrir el casco y dejar que el cargamento de su interior quedase contenido en dicha cámara para después acometer la extracción por bombeo.

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