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Elorza apoya a Medem en su visión de "la violencia del conflicto vasco de uno y otro lado"

El alcalde de San Sebastián ha tardado poco en arropar al director de cine Julio Medem. Elorza dice echar de menos algunos testimonios que aporten una "visión distinta" en la película "La pelota vasca". Medem considera que falta "gente de los extremos" pero que tiene los ojos "limpios de odio" para reflejar "el conflicto vasco" y la "violencia de uno y otro lado".

(Libertad Digital) Las denuncias de la portavoz de la plataforma Profesores para la Libertad, Gotzone Mora, y el periodista y escritor, Iñaki Ezquerra, han anticipado lo que puede suceder el próximo día 21 de septiembre en el festival de Cine de San Sebastián. La película “La pelota vasca, la piel contra la piedra” no ha llegado a proyectarse y ya ha levantado ampollas entre las víctimas del terrorismo etarra. Del testimonio de Mora y Ezquerra, y de las propias explicaciones del cineasta y sus defensores, se deduce que la cinta a estrenar vuelve a esgrimir el conocido argumento de la equidistancia entre víctimas y verdugos, es decir, la existencia de violencia “en los dos lados” en medio de un “conflicto”. El alcalde de San Sebastián, Odón Elorza y el propio Medem coinciden en que faltan versiones. ¿Cuáles? Según el alcalde socialista “personas que pudieran aportar una visión distinta”. Según Julio Medem, “gente de los extremos”, es decir el testimonio de un etarra frente al de una víctima, según su teoría.

Lejos de las ganas de vomitar que sufre Odón Elorza cuando oye y lee testimonios de antiguos compañeros, el alcalde negó este miércoles que la película-documental de Julio Medem dé coartada al terrorismo, como sostienen los representantes del Foro de Ermua, Gotzone Mora e Iñaki Ezquerra. Admite Elorza que el trabajo de Medem adolece de falta de testimonios "de personas que pudieran aportar una visión distinta". No es una crítica sino una aportación más a la estrategia de la equidistancia. Ademas de Mora y Ezquerra, en la cinta aparecen los testimonios del propio alcalde socialista, de Ibarretxe, de Felipe González y de Otegi.

Pero los miembros del Foro de Ermua acusan al director y guionista vasco de "dar una coartada ideológica a la violencia terrorista" en dicha cinta, en la que consideran que hay "superioridad numérica" de los testimonios anticonstitucionales y "las víctimas aparecen como puro trámite" por lo que han pedido que se retire su aparición en la película. Elorza negó que "haya material para que las víctimas emprendan acciones legales", como aseguró Ezquerra.

Los dos lados del conflicto vasco, según Medem

El director de cine difundió este miércoles un comunicado en el que renuncia "a responder a las acusaciones hechas contra mi película La Pelota vasca" hasta que se estrene en el Festival de San Sebastián el próximo fin de semana. "En estos momentos tan delicados para mi película y mi persona, quiero reivindicar con todas mis fuerzas los ojos limpios en el esfuerzo por el no odio", dijo Medem en la nota y añadió que es “una puesta en escena comprometida con la no violencia y el diálogo político”.

Así que el director se remite a su ideario: "mi única respuesta es la que pueda extraerse de la memoria "un pájaro vuela dentro de una garganta" que terminé de escribir el 10 de septiembre, y de la entrevista de Ricardo Aldarondo publicada en El Diario Vasco el pasado sábado con la que me siento plenamente identificado". En la citada entrevista, el director lamenta que "falta gente de los extremos , pero hay un amplio abanico entre esos dos extremos, una gran diversidad de colores"

Y en esa memoria a la que se refiere en su nota Medem, se entiende la indignación de Mora y Ezquerra. Allí, según destaca la agencia EFE, el director dice que "todos los documentales que he visto últimamente sobre el conflicto vasco, en algunos hasta se dice que no hay conflicto, tratan de las víctimas del terrorismo". Opina también que la falta de libertad y los asesinatos en el País Vasco es “el peor y más acuciante de los problemas, pero que no es el único". Así que, según su particular visión, "después del devastador problema moral de la violencia, existe un grave y crónico trastorno de origen político que en los últimos años ha desembocado en la actual guerra (política) entre los Gobiernos español y vasco".

Concluye Julio Medem: "He de reconocer que mi búsqueda personal del no odio me resulta (ante mi mismo) frívola si la comparo con la situación de todas aquellas personas que tienen motivos profundos para odiar" por sufrir "la violencia relacionada con el conflicto vasco de uno y otro lado". "Quiero dejar claro también que la gravísima situación personal de las víctimas y los amenazados hace brotar en mí toda mi solidaridad, incondicional desde el punto de vista humano, pero esto no incluye necesariamente mi identificación ideológica, sobre todo cuando contemplo (con horror) cómo algunos son manipulados y utilizados políticamente; el PP ha hecho de esto su especialidad , ya que es su gran filón de votos en España".

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