L D (EFE) El presidente de FEECE, Primitivo Rodríguez, en nombre de los exhibidores de cine, compareció este martes ante los medios de comunicación para confirmar los datos del presentados por la Academia de Cine y el ICAA.
Según estos datos, el número de espectadores entre 1994 y 2001 fue experimentando gradualmente un incremento y pasó de 94.267.014 a 146.810.494, mientras que en 2002 empezó a descender de 140.7717.599 a 132.890.510 en 2003. Para la empresarios del cine, las razones principales de la pérdida de espectadores se centran en que "en toda Europa, excepto Italia, se está produciendo una caída de espectadores, lo que indica una tendencia general dentro del mercado cinematográfico y que debe de explicarse por causas más profundas que el incremento del coste de las entradas de cine". Los casos más llamativos, según los datos de la Union Internacionale de Cinemas, son los de Francia, Reino Unido y España.
La falta de sintonía de las producciones cinematográficas con el mercado se reflejan en que de las 102 películas españolas exhibidas en nuestro país sólo 3 han conseguido estar entre las tres primeras en cuanto a taquilla y recaudación, predominando el cine de Estados Unidos en la cabeza de la lista. Otro de los motivos que aducen los empresarios es el aumento del uso del DVD y el "home cinema", como consecuencia del aumento del poder adquisitivo de los jóvenes y una mayor oferta audiovisual en los propios domicilios. Además, el envejecimiento de la población española hace que el número de espectadores sea menor, ya que son los más jóvenes los que van al cine.
La falta de sintonía de las producciones cinematográficas con el mercado se reflejan en que de las 102 películas españolas exhibidas en nuestro país sólo 3 han conseguido estar entre las tres primeras en cuanto a taquilla y recaudación, predominando el cine de Estados Unidos en la cabeza de la lista. Otro de los motivos que aducen los empresarios es el aumento del uso del DVD y el "home cinema", como consecuencia del aumento del poder adquisitivo de los jóvenes y una mayor oferta audiovisual en los propios domicilios. Además, el envejecimiento de la población española hace que el número de espectadores sea menor, ya que son los más jóvenes los que van al cine.
La subida del precio de las entradas
Según Primitivo Rodríguez, "en cuanto al comentario que se ha visto publicado sobre que la subida del precio de las entradas ha generado una disminución de público en las salas, existe la paradoja de que justamente en el año 2001, en el que pudo haber una mayor diferencia entre el IPC y el precio de las entradas, el número de asistentes al cine creció especialmente".
Según Primitivo Rodríguez, "en cuanto al comentario que se ha visto publicado sobre que la subida del precio de las entradas ha generado una disminución de público en las salas, existe la paradoja de que justamente en el año 2001, en el que pudo haber una mayor diferencia entre el IPC y el precio de las entradas, el número de asistentes al cine creció especialmente".
El director general de la FEECE, Rafael Alvero, dejó bien claro que "las películas que interesan llenan las salas, las que no, nos las dejan vacías", como ha ocurrido con la televisión, en donde "los programas de mayor audiencia son las series de ficción españolas, por encima de las norteamericanas, sencillamente porque los guiones, las historias y los actores de esas series conectan rotundamente con el gusto del público".