L D (EFE) "Siempre que no se gana es un fracaso. El objetivo es ganar en todo lo que se participa, y yo siempre pienso en ganar todos los títulos que estoy disputando", señalaba el brasileño en rueda de prensa tras el entrenamiento matinal de este martes.
Tras reconocer que, en el caso de la Liga, las opciones de ganar el título son mínimas, Ronaldinho remarcaba que ahora "hay pelear al máximo" por intentar al menos conseguir la cuarta plaza que clasificaría al equipo para disputar la próxima temporada la Liga de Campeones. Uno de los problemas que ha tenido hasta ahora el equipo azulgrana es, a su juicio, la falta de "regularidad", pero Ronaldinho sigue mostrándose optimista y considera que "el pensamiento es participar en todas las competiciones para ganar y conquistar todos los objetivos".
Respecto a su sustitución el pasado domingo en la segunda parte del partido de Liga contra el Sevilla, Ronaldinho explicaba que ello obedece a las conversaciones que ha mantenido con el técnico, Frank Rijkaard, para dosificar su esfuerzo y evitar de esta manera posibles sobrecargas o lesiones musculares. Pese a admitir que el equipo catalán ganó el partido ante el Sevilla sin jugar bien, el brasileño considera que el equipo atravesaba un mal momento y necesitaba por encima de todo ganar, lo que no implica que el objetivo sea "ganar y jugar bien".
La posibilidad de que Rijkaard sea destituido en caso de seguir los malos resultados del equipo es algo que no sorprende a Ronaldinho, ya que "siempre que las cosas no salen bien, el primero que recibe las culpas es el entrenador". El delantero azulgrana no expresaba ninguna preferencia por jugar con el tridente atacante (junto a Patrick Kluivert y Javier Saviola) o con extremos, por entender que todos los jugadores del equipo tienen "calidad". Asimismo, considera que los posibles refuerzos que decida el club para la próxima temporada serán "bienvenidos", ya que "siempre es bueno tener a jugadores de mucha calidad con nosotros".
La no clasificación de Brasil para la disputa del torneo de fútbol de los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 ha entristecido a Ronaldinho, quien reconoció que tenía "muchas ganas" de participar en este evento. Sin embargo, se muestra partidario de "dar fuerza" y apoyo a los jugadores jóvenes que defendieron los colores de la selección brasileña y que no consiguieron la clasificación olímpica.
Otra circunstancia "triste" para Ronaldinho ha sido la muerte repentina, mientras disputaba un partido de fútbol de la liga portuguesa, del jugador húngaro del Benfica Miklos Feher. "No hay mucho que hablar. Ver una escena como esta hace que pensemos en todo lo que pasa en nuestra vida y en lo que puede pasar. Nosotros tenemos que aprovechar cada día, porque no sabemos qué puede pasar", dice.
Tras reconocer que, en el caso de la Liga, las opciones de ganar el título son mínimas, Ronaldinho remarcaba que ahora "hay pelear al máximo" por intentar al menos conseguir la cuarta plaza que clasificaría al equipo para disputar la próxima temporada la Liga de Campeones. Uno de los problemas que ha tenido hasta ahora el equipo azulgrana es, a su juicio, la falta de "regularidad", pero Ronaldinho sigue mostrándose optimista y considera que "el pensamiento es participar en todas las competiciones para ganar y conquistar todos los objetivos".
Respecto a su sustitución el pasado domingo en la segunda parte del partido de Liga contra el Sevilla, Ronaldinho explicaba que ello obedece a las conversaciones que ha mantenido con el técnico, Frank Rijkaard, para dosificar su esfuerzo y evitar de esta manera posibles sobrecargas o lesiones musculares. Pese a admitir que el equipo catalán ganó el partido ante el Sevilla sin jugar bien, el brasileño considera que el equipo atravesaba un mal momento y necesitaba por encima de todo ganar, lo que no implica que el objetivo sea "ganar y jugar bien".
La posibilidad de que Rijkaard sea destituido en caso de seguir los malos resultados del equipo es algo que no sorprende a Ronaldinho, ya que "siempre que las cosas no salen bien, el primero que recibe las culpas es el entrenador". El delantero azulgrana no expresaba ninguna preferencia por jugar con el tridente atacante (junto a Patrick Kluivert y Javier Saviola) o con extremos, por entender que todos los jugadores del equipo tienen "calidad". Asimismo, considera que los posibles refuerzos que decida el club para la próxima temporada serán "bienvenidos", ya que "siempre es bueno tener a jugadores de mucha calidad con nosotros".
La no clasificación de Brasil para la disputa del torneo de fútbol de los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 ha entristecido a Ronaldinho, quien reconoció que tenía "muchas ganas" de participar en este evento. Sin embargo, se muestra partidario de "dar fuerza" y apoyo a los jugadores jóvenes que defendieron los colores de la selección brasileña y que no consiguieron la clasificación olímpica.
Otra circunstancia "triste" para Ronaldinho ha sido la muerte repentina, mientras disputaba un partido de fútbol de la liga portuguesa, del jugador húngaro del Benfica Miklos Feher. "No hay mucho que hablar. Ver una escena como esta hace que pensemos en todo lo que pasa en nuestra vida y en lo que puede pasar. Nosotros tenemos que aprovechar cada día, porque no sabemos qué puede pasar", dice.