L D (EFE) El traslado desde la finca de un amigo en la que estaba alojado hasta la clínica Suizo Argentina se ha producido a las seis de la mañana, después de una agitada jornada en la que se excedió en las comidas y recibió varias visitas, entre ellas el equipo completo del Bolívar, el campeón argentino de voleibol.
El parte médico del centro señalaba siete horas después de su ingreso que Maradona tuvo problemas por una "transgresión alimentaria", que su estado es "estable" y que ha vuelto a cuidados intensivos sólo para facilitar el control de su estado mediante los monitores y para preservar su privacidad. Anteriormente, su médico personal, Alfredo Cahe, dijo a los periodistas que el regreso del Pelusa a la Suizo Argentina se debió a la necesidad de efectuarle un control general antes de su traslado a Cuba, donde reside desde hace cuatro años. Cahe ha dicho que Maradona estará en la clínica entre dos y tres días, que después viajará a La Habana y que su sobrepeso le ha provocado "una exageración de fatiga".
A esas horas, un abogado presentaba ante la Justicia una petición para que se investigue si Maradona fue víctima de "abandono". La denuncia del abogado Enrique Piragine ante la Cámara del Crimen alcanzó una inusitada difusión durante la mañana, en momentos en que los comentaristas de numerosos medios de comunicación coincidían en que era "previsible" que el ex futbolista volviera a un hospital, tras haberse ido de la Suizo Argentina sin el alta médica y hacer durante varias jornadas la vida de una persona sana. El abogado solicitó a la Justicia que se determine "la responsabilidad de aquellos que permiten colocarlo o dejarlo colocar en situación de riesgo" para su vida.
Apenas transcurridas un par de horas del regreso de Maradona a la clínica, decenas de aficionados al fútbol y admiradores volvieron a los alrededores de esa unidad sanitaria con banderas, carteles y pancartas de apoyo al astro, tal como sucedió durante las casi dos semanas que estuvo en ese lugar. Durante los seis días en que Maradona estuvo en la finca del empresario Pascual Mastellone, jugó diariamente al golf, estuvo en la piscina, recibió a la presentadora Susana Giménez y apareció en directo en su programa de televisión, reunió a varios amigos para cenar y saludó a los aficionados que se concentraron en el lugar.
El parte médico del centro señalaba siete horas después de su ingreso que Maradona tuvo problemas por una "transgresión alimentaria", que su estado es "estable" y que ha vuelto a cuidados intensivos sólo para facilitar el control de su estado mediante los monitores y para preservar su privacidad. Anteriormente, su médico personal, Alfredo Cahe, dijo a los periodistas que el regreso del Pelusa a la Suizo Argentina se debió a la necesidad de efectuarle un control general antes de su traslado a Cuba, donde reside desde hace cuatro años. Cahe ha dicho que Maradona estará en la clínica entre dos y tres días, que después viajará a La Habana y que su sobrepeso le ha provocado "una exageración de fatiga".
A esas horas, un abogado presentaba ante la Justicia una petición para que se investigue si Maradona fue víctima de "abandono". La denuncia del abogado Enrique Piragine ante la Cámara del Crimen alcanzó una inusitada difusión durante la mañana, en momentos en que los comentaristas de numerosos medios de comunicación coincidían en que era "previsible" que el ex futbolista volviera a un hospital, tras haberse ido de la Suizo Argentina sin el alta médica y hacer durante varias jornadas la vida de una persona sana. El abogado solicitó a la Justicia que se determine "la responsabilidad de aquellos que permiten colocarlo o dejarlo colocar en situación de riesgo" para su vida.
Apenas transcurridas un par de horas del regreso de Maradona a la clínica, decenas de aficionados al fútbol y admiradores volvieron a los alrededores de esa unidad sanitaria con banderas, carteles y pancartas de apoyo al astro, tal como sucedió durante las casi dos semanas que estuvo en ese lugar. Durante los seis días en que Maradona estuvo en la finca del empresario Pascual Mastellone, jugó diariamente al golf, estuvo en la piscina, recibió a la presentadora Susana Giménez y apareció en directo en su programa de televisión, reunió a varios amigos para cenar y saludó a los aficionados que se concentraron en el lugar.
El parte médico indica la causa de su nuevo ingreso al sanatorio, pero no los efectos. Las versiones coinciden en que es asistido con una máscara de oxígeno. Maradona ha vuelto a conmover a la opinión pública argentina, que teje todo tipo de conjeturas sobre su estado de salud y también sobre su futuro inmediato.