L D (EFE) El acuerdo, que se firmará oficialmente el próximo lunes, se gestó el pasado miércoles, luego de que el representante especial de la ONU en Sudán, Jan Pronk, e Ismail mantuvieran reuniones durante dos días.
Naciones Unidas espera que el régimen de Jartum, ahora que lo ha aceptado, lo ponga en práctica, para que el Consejo de Seguridad no haya de aprobar acciones adicionales. Este último organismo aprobó la semana pasada una resolución donde se daba a las autoridades que detentan el poder en Sudán 30 días para cumplir con sus compromisos; de lo contrario, se les aplicarían sanciones económicas y diplomáticas.
Naciones Unidas espera que el régimen de Jartum, ahora que lo ha aceptado, lo ponga en práctica, para que el Consejo de Seguridad no haya de aprobar acciones adicionales. Este último organismo aprobó la semana pasada una resolución donde se daba a las autoridades que detentan el poder en Sudán 30 días para cumplir con sus compromisos; de lo contrario, se les aplicarían sanciones económicas y diplomáticas.
El pasado 3 de julio el dictador sudanés, Omar Hasán al Bachir, se comprometió con el secretario general de la ONU, Kofi Annan, a desarmar las milicias janjaweed, llevar a los responsables de las atrocidades perpetradas en Darfur ante la justicia y proteger a los desplazados, así como a dar pleno acceso a la zona tanto al personal de las Naciones Unidas como al de las ONG.
Las milicias janjaweed son responsables de la muerte de 50.000 darfureños, así como del desplazamiento de 1,2 millones de personas, 150.000 de las cuales se refugiaron en el vecino Chad.