LD (EFE) Los datos recogidos en el Boletín de Información Comercial Española (ICE) muestran que en 1999 las exportaciones de petróleo y sus derivados ascendieron a un total de 2.161,2 millones de euros, mientras que las importaciones fueron de 7.722,2 millones de euros, lo que originó un déficit de 5.561 millones de euros .
Sin embargo, en 2003 , el déficit del petróleo y sus derivados ascendió hasta los 11.138 millones de euros –con unas exportaciones de 3.485 millones de euros y unas importaciones que alcanzaron los 14.623 millones de euros– cifra que supuso el 100,29 por ciento más que hace cinco años.
Las importaciones de productos energéticos que hizo España en 1999 alcanzaron los 9.949 millones de euros, cifra que representó el 7,15 por ciento del total de los bienes importados. Sin embargo, en 2003 las importaciones energéticas alcanzaron un valor de 19.135,9 millones de euros, lo que supuso el 10,39 por ciento de las importaciones totales, tres puntos porcentuales más que hace cinco años.
Los últimos datos publicados en el Boletín Estadístico del Banco de España de julio de 2004 proporcionan información sobre el saldo comercial de los productos energéticos y muestran un empeoramiento del déficit de estos bienes, al aumentar el 95,24 por ciento en los últimos cinco años.
Otra forma de medir la dependencia energética de un país es con el indicador de la ventaja comparativa revelada , que elabora la Subdirección General de Estudios sobre el Sector Exterior y la Competencia. Este indicador se calcula al restar las exportaciones de un país de sus importaciones y al dividir el resultado por la suma total de ambas magnitudes. En el caso del petróleo y sus derivados, este índice se sitúa en un valor negativo del 61,5 muy por encima de otra rúbricas donde el comercio español si tiene ventajas comparativas reveladas, como es el caso de grasas y aceites (48,1) o automóviles y motos (16,6).
Sin embargo, en 2003 , el déficit del petróleo y sus derivados ascendió hasta los 11.138 millones de euros –con unas exportaciones de 3.485 millones de euros y unas importaciones que alcanzaron los 14.623 millones de euros– cifra que supuso el 100,29 por ciento más que hace cinco años.
Las importaciones de productos energéticos que hizo España en 1999 alcanzaron los 9.949 millones de euros, cifra que representó el 7,15 por ciento del total de los bienes importados. Sin embargo, en 2003 las importaciones energéticas alcanzaron un valor de 19.135,9 millones de euros, lo que supuso el 10,39 por ciento de las importaciones totales, tres puntos porcentuales más que hace cinco años.
Los últimos datos publicados en el Boletín Estadístico del Banco de España de julio de 2004 proporcionan información sobre el saldo comercial de los productos energéticos y muestran un empeoramiento del déficit de estos bienes, al aumentar el 95,24 por ciento en los últimos cinco años.
Otra forma de medir la dependencia energética de un país es con el indicador de la ventaja comparativa revelada , que elabora la Subdirección General de Estudios sobre el Sector Exterior y la Competencia. Este indicador se calcula al restar las exportaciones de un país de sus importaciones y al dividir el resultado por la suma total de ambas magnitudes. En el caso del petróleo y sus derivados, este índice se sitúa en un valor negativo del 61,5 muy por encima de otra rúbricas donde el comercio español si tiene ventajas comparativas reveladas, como es el caso de grasas y aceites (48,1) o automóviles y motos (16,6).