L D (EFE) Los trabajadores rumanos, que suelen encontrar empleo como camareros, obreros de la construcción o enfermeros, mandaron el año pasado a sus familiares unos 1.300 millones dólares, 200 millones más que las inversiones extranjeras directas en Rumanía.
Según datos oficiales, estos estimados 900.000 trabajadores en el exterior también han aportado a reducir notablemente la tasa de desempleo en Rumanía, que ha pasado desde marzo del año 2002 del 13,4 hasta el 8,3 por ciento actual. Cifras relevadas este lunes por una encuesta realizada por el Instituto CURS indican además que el 12 por ciento de los hogares rumanos se sustentan con el dinero enviado del extranjero por alguno de sus familiares.
Los efectos de este éxodo hacia Occidente se nota en las regiones pobres, donde la reestructuración de varias ramas industriales dejaron sin trabajo a grandes masas de obreros.
Según datos oficiales, estos estimados 900.000 trabajadores en el exterior también han aportado a reducir notablemente la tasa de desempleo en Rumanía, que ha pasado desde marzo del año 2002 del 13,4 hasta el 8,3 por ciento actual. Cifras relevadas este lunes por una encuesta realizada por el Instituto CURS indican además que el 12 por ciento de los hogares rumanos se sustentan con el dinero enviado del extranjero por alguno de sus familiares.
Los efectos de este éxodo hacia Occidente se nota en las regiones pobres, donde la reestructuración de varias ramas industriales dejaron sin trabajo a grandes masas de obreros.