L D (EFE) La Copa conserva intactas todas sus señas de identidad. Es tan fascinante, por la propia competición y por el ambiente que genera a su alrededor, que la ACB ha alumbrado una pequeña réplica en la Supercopa, que se juega igual pero con la mitad de equipos, para inaugurar la temporada y, de paso, renovar la anticuada fórmula del Partido de las Estrellas. El agotamiento de la fórmula del All Star, importada de los Estados Unidos, ha dado pie al cambio y el hecho de que el sustituto elegido haya sido un formato de Copa en pequeño lo dice todo.
En contra de lo que ya era casi habitual, el Barcelona, vigente campeón del trofeo, ha dejado el papel de gran favorito a un lado. Del mismo modo, el Real Madrid, finalista el año pasado y que acostumbraba a visitar el torneo con la cruz sobre la cabeza, aterriza en El Pilar como líder de la ACB. Los blancos han recuperado peso específico y, en otra excepción al guión de los últimos tiempos, tendrán a su público al lado porque los abonos concedidos al club abandonaron las taquillas en unas pocas horas.
El Barcelona pisará la cancha un día antes que el equipo de Bozidar Maljkovic. Enfrente estará el Pamesa Valencia de Pablo Laso. Este es el segundo encuentro de la jornada de apertura, la del jueves (20,15 horas). Los blancos también tienen el segundo puesto del programa, a la misma hora, pero el viernes y con el Adecco Estudiantes en la otra mitad del parqué.
Las otras dos eliminatorias de cuartos de final tampoco tienen desperdicio. El jueves (18,00 horas), el Unicaja se mide al Etosa Alicante, la gran revelación de la temporada, tercero en la clasificación, que durante muchas jornadas ocupó el liderato y viene de lograr la victoria más amplia de toda su historia en la ACB con más de treinta puntos de diferencia ante el Estudiantes. En el emparejamiento que completa el cuadro de los cuartos de final (viernes, 18,00), el Tau Cerámica, que es el equipo más en forma del campeonato liguero y marcha en cabeza igualado con el Real Madrid, espera al Gran Canaria, cuya buena marcha se ha visto alterada en las últimas jornadas y parece haber perdido gas, aunque en la Copa todo es imprevisible.
Como siempre ocurre en la Copa del Rey nada está asegurado y sólo el más fuerte, el que gane tres partidos seguidos, levantará los brazos en Zaragoza.
El Barcelona pisará la cancha un día antes que el equipo de Bozidar Maljkovic. Enfrente estará el Pamesa Valencia de Pablo Laso. Este es el segundo encuentro de la jornada de apertura, la del jueves (20,15 horas). Los blancos también tienen el segundo puesto del programa, a la misma hora, pero el viernes y con el Adecco Estudiantes en la otra mitad del parqué.
Las otras dos eliminatorias de cuartos de final tampoco tienen desperdicio. El jueves (18,00 horas), el Unicaja se mide al Etosa Alicante, la gran revelación de la temporada, tercero en la clasificación, que durante muchas jornadas ocupó el liderato y viene de lograr la victoria más amplia de toda su historia en la ACB con más de treinta puntos de diferencia ante el Estudiantes. En el emparejamiento que completa el cuadro de los cuartos de final (viernes, 18,00), el Tau Cerámica, que es el equipo más en forma del campeonato liguero y marcha en cabeza igualado con el Real Madrid, espera al Gran Canaria, cuya buena marcha se ha visto alterada en las últimas jornadas y parece haber perdido gas, aunque en la Copa todo es imprevisible.
Como siempre ocurre en la Copa del Rey nada está asegurado y sólo el más fuerte, el que gane tres partidos seguidos, levantará los brazos en Zaragoza.