L D (EFE) El Papa apareció tras los cristales de su ventana del décimo piso del centro hospitalario después de que centenares de personas le hubieran aclamado con vítores y cánticos durante varias horas. Vestido con la casulla litúrgica de color morado y la cruz episcopal en el pecho, Juan Pablo II saludó e impartió su bendición repetidas veces con la mano derecha.
La presencia de fieles en la explanada de acceso al hospital se debió al hecho de que todos los miércoles el Pontífice celebra una audiencia general en el Vaticano, suspendida las dos últimas semanas por sus problemas de salud. Entre los congregados había varios grupos de escolares que entonaron canciones para saludar a Juan Pablo II.
El Papa se recupera sin novedad y recibe a algunos de sus colaboradores, como hizo en la tarde del martes con el arzobispo de Moscú, Taddeus Kondrusiezicz, a quien preguntó por la situación de su archidiócesis, según relató él mismo a la salida. El arzobispo afirmó que el Papa Juan Pablo II le habló con voz clara y que le encontró mejor de lo que estaba leyendo los medios de comunicación. Monseñor explicó que el Papa le recibió con una "gran sonrisa" y le preguntó "¿Cómo van las cosas por Moscú?" con voz clara.
El Papa se recupera sin novedad y recibe a algunos de sus colaboradores, como hizo en la tarde del martes con el arzobispo de Moscú, Taddeus Kondrusiezicz, a quien preguntó por la situación de su archidiócesis, según relató él mismo a la salida. El arzobispo afirmó que el Papa Juan Pablo II le habló con voz clara y que le encontró mejor de lo que estaba leyendo los medios de comunicación. Monseñor explicó que el Papa le recibió con una "gran sonrisa" y le preguntó "¿Cómo van las cosas por Moscú?" con voz clara.
El arzobispo de la capital rusa le respondió que "todos los católicos del país están rezando por su salud" y añadió que le pidió la bendición para laIglesia católica rusa. Según Monseñor Kondrusiezicz, los rusos "aprecian sobre todo la labor del Papa en intentar la reconciliación entre las dos iglesias" (la ortodoxa y la católica).
Para respaldar las noticias favorables sobre la salud del Papa el Vaticano ha informado de que pasará la Semana Santa en el Vaticano y participará de alguna manera en los ritos propios de esas fechas, incluso con la bendición a los fieles en el domingo de Pascua. No obstante, por el momento no hay fecha de cuándo Juan Pablo II podría ser dado de alta para regresar al Vaticano.
Según informó el Vaticano, el Juan pablo II sólo impartirá la bendición "Urbi et Orbi" en el día de Pascua, pero no se descarta que presida el Vía Crucis del Viernes Santo. Ésta es la única ceremonia que en el programa de ritos hecho público por el Vaticano aparece sin oficiante, lo que hace suponer que el Papa no quiere renunciar tan de antemano a presidirla.