L D (EFE) La reclamación española y una serie de discusiones sobre si debía ser aceptada entre jueces y representantes de los equipos mantuvo la competición parada durante más de una hora y encrespó los ánimos del público, que protestó reiteradamente y abucheó al estadounidense y a los árbitros. Alonso cayó derrotado en el asalto de desempate de su semifinal por "el punto de oro" de López, pero el equipo español estimó, como se pudo ver en la repetición por las pantallas del Palacio de los Deportes de Madrid, que la patada no era reglamentaria porque le había dado en el glúteo y no en el peto como exigen las normas .
Cuando el americano ya se subía al tatami para disputar la final con el iraní Ali Tajik, por la megafonía se llamó al español que ya estaba en la grada resignado a no pelear por el oro. Alonso bajó a la pista y se anunció que comenzaría el asalto de desempate en el segundo en el que López había dado la patada de la polémica. Entonces comenzaron, con el público gritando "Rosendo, Rosendo" y "España, España", una serie de reuniones y deliberaciones que, tras más de una hora, dieron el triunfo final a López, que se dispuso a pelear con el iraní ante la indignación de los españoles.
Tajik contó con el apoyo mayoritario del público español, pero no pudo evitar que López, doble campeón olímpico y que hoy sumó su tercer mundial, le ganará por 4-3. Fuentes de la delegación española criticaron la decisión de los jueces y dijeron que los mismos finalmente se dejaron presionar por los estadounidenses y su poder en la Federación Internacional que controlan los surcoreanos. También destacaron el enorme poder que tiene la colonia del país asiático en los Estados Unidos. Las mismas fuentes lamentaron que los sucesos de esta tarde puedan perjudicar al taekwondo como deporte olímpico, puesta en cuestión, y la imagen del mismo en el mundo.
Cuando el americano ya se subía al tatami para disputar la final con el iraní Ali Tajik, por la megafonía se llamó al español que ya estaba en la grada resignado a no pelear por el oro. Alonso bajó a la pista y se anunció que comenzaría el asalto de desempate en el segundo en el que López había dado la patada de la polémica. Entonces comenzaron, con el público gritando "Rosendo, Rosendo" y "España, España", una serie de reuniones y deliberaciones que, tras más de una hora, dieron el triunfo final a López, que se dispuso a pelear con el iraní ante la indignación de los españoles.
Tajik contó con el apoyo mayoritario del público español, pero no pudo evitar que López, doble campeón olímpico y que hoy sumó su tercer mundial, le ganará por 4-3. Fuentes de la delegación española criticaron la decisión de los jueces y dijeron que los mismos finalmente se dejaron presionar por los estadounidenses y su poder en la Federación Internacional que controlan los surcoreanos. También destacaron el enorme poder que tiene la colonia del país asiático en los Estados Unidos. Las mismas fuentes lamentaron que los sucesos de esta tarde puedan perjudicar al taekwondo como deporte olímpico, puesta en cuestión, y la imagen del mismo en el mundo.
En la final, Asensio venció a la surcoreana Yu Eun por un claro 4-1, sin dar opción alguna a la polémica arbitral si tenemos en cuenta que los coreanos presiden la Federación Internacional y es muy raro ver que uno de sus competidores pierda una final, aunque su rival pelee en casa. A las medallas de Asensio y de Alonso se sumo el tercer puesto de la española Yvonne Lallana en el peso súper ligero femenino. Lallana cayó claramente ante la surcoreana Hwang Kyung-Seon, a la postre campeona del mundo, en la semifinal por 6-0.
Ayer, Jon García y Brigitte Yagüe fuero plata, en medio y mosca, y Aitiber Los Arcos fue bronce en el peso medio femenino. El mini mosca masculino disputado esta tarde fue para el surcoreano Kim Jin-Hee, categoría en la que el mexicano Gerardo Rodríguez dio la segunda medalla, esta de bronce, a su país.