L D (EFE) El derbi Betis-Sevilla será otro de los alicientes de esta trigésimo quinta jornada, que marcará el desenlace de la Liga tanto en la parte alta como en los últimos puestos, en los que el Levante, cuarto por la cola, se ha erigido en juez y puede decidir el destino de Numancia y Albacete, los dos últimos de la tabla.
El Bernabéu se volverá a llenar para presenciar el Real Madrid-Racing de Santander, al que Vanderlei Luxemburgo y sus hombres llegan aún con más necesidad de ganar que en las jornadas anteriores. Los blancos no tienen permiso para cometer errores porque una derrota suya y una victoria azulgrana al día siguiente en Mestalla daría la Liga al equipo de Frank Rijkaard, que se colocaría con nueve puntos de ventaja, los mismos que quedarán por disputarse tras esta jornada, pero con la diferencia de goles a su favor.
La tensión entre Barcelona y Madrid ha vivido esta semana un nuevo episodio tras las declaraciones del madridista Roberto Carlos, que ha dado por hecha la victoria de su eterno rival en la última jornada en San Sebastián, donde el sábado pasado los blancos sumaron sus últimos tres puntos y el público de Anoeta se dedicó a animar al Barca.
El Bernabéu se volverá a llenar para presenciar el Real Madrid-Racing de Santander, al que Vanderlei Luxemburgo y sus hombres llegan aún con más necesidad de ganar que en las jornadas anteriores. Los blancos no tienen permiso para cometer errores porque una derrota suya y una victoria azulgrana al día siguiente en Mestalla daría la Liga al equipo de Frank Rijkaard, que se colocaría con nueve puntos de ventaja, los mismos que quedarán por disputarse tras esta jornada, pero con la diferencia de goles a su favor.
La tensión entre Barcelona y Madrid ha vivido esta semana un nuevo episodio tras las declaraciones del madridista Roberto Carlos, que ha dado por hecha la victoria de su eterno rival en la última jornada en San Sebastián, donde el sábado pasado los blancos sumaron sus últimos tres puntos y el público de Anoeta se dedicó a animar al Barca.
El broche a los partidos del sábado lo pondrá el derbi del Benito Villamarín entre Betis-Sevilla, al que los locales llegan después de empatar el fin de semana pasado en Santander (1-1) y a un punto de la UEFA y los visitantes de Joaquín Caparrós sólidamente instalados en el tercer puesto con la Liga de Campeones en el horizonte.
Cuatro partidos, Málaga-Villarreal, Espanyol-Numancia, Getafe-Real Sociedad y Albacete-Levante, arrancarán a las 17.00 horas del domingo y sus resultados probablemente aclararán el panorama del descenso a Segunda, al que parecen abocados Albacete y Numancia. El debut de José Luis Oltra en el banquillo del Levante, en sustitución del destituido Bernd Schuster, no puede acaparar más atención ya que su equipo con no perder en el Carlos Belmonte mandará a Segunda a manchegos y sorianos, que no dependen sólo de su resultado en Montjuic.
Mestalla levantará el telón a las 19.00 horas para acoger el Valencia-Barcelona, un encuentro que enfrenta al último campeón y puede que a su sucesor, una semana más obligado a ganar y condicionado por el resultado del Real Madrid, que es el único que puede aplazar o evitar el alirón de los de Rijkaard.
Con campeón o sin campeón la jornada se cerrará en Riazor, donde Deportivo y Atlético de Madrid protagonizarán un duelo menos intenso de lo esperado por ambos equipos a estas alturas de la Liga y en un ambiente un tanto crispado por el contacto del equipo rojiblanco con el padre de Albert Luque para hablar del futuro del internacional.