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El Real Madrid se deja querer en Chicago y llenará el mítico Soldier Field ante el Chivas mexicano

La ciudad de Chicago ha recibido al Real Madrid con los brazos abiertos. Los jugadores y directivos blancos han pasado su primer día de la gira mundial vendiendo la imagen madridista, visitando al alcalde de la ciudad, viendo un partido de beisbol con Raúl de pitcher improvisado y, por último, realizando un entrenamiento en el escenario del encuentro de esta noche (00:30 horas) ante el Chivas mexicano, el Soldier Field.

La ciudad de Chicago ha recibido al Real Madrid con los brazos abiertos. Los jugadores y directivos blancos han pasado su primer día de la gira mundial vendiendo la imagen madridista, visitando al alcalde de la ciudad, viendo un partido de beisbol con Raúl de pitcher improvisado y, por último, realizando un entrenamiento en el escenario del encuentro de esta noche (00:30 horas) ante el Chivas mexicano, el Soldier Field.
L D (EFE) Pero el apartado deportivo es lo que menos interesa a los aficionados de Chicago que quieren, como sucedía con el legendario Michael Jordan, estar cerca de las grandes figuras del Real Madrid para comprar sus camisetas y conseguir que se las firmen. Los promotores de la gira del Real Madrid también tienen el objetivo de sacar el máximo beneficio económico de su presencia y la primera actividad del equipo fue la de visitar un centro comercial, donde se vendían sus camisetas y en sólo una hora de presencia más de 300 fueron compradas por los aficionados.

La labor de promoción de imagen iban a continuar, pero esta vez sólo les tocaba a los tres capitanes del equipo, Raúl González, José María Gutierrez "Guti" y el brasileño Roberto Carlos. Su misión era la de visitar el legendario campo de béisbol de los Cachorros de Chicago, el Wrigley Field, donde los iba a recibir el lanzador estelar venezolano Carlos Zambrano, un fanático y admirador de Roberto Carlos. Los tres jugadores del Real Madrid se enfundaron las camisetas y las gorras de los Cachorros para recorrer con Zambrano las instalaciones del campo, que tenía ya llenas las gradas con los fanáticos que iban a presenciar el partido de la competición regular frente a los Piratas de Pittsburgh.

Una vez más, los seguidores del Real Madrid en Chicago acudieron también al Wrigley Field para que los capitanes les firmasen autógrafos, mientras que Zambrano tenía preparada su propia colección de camiseta y otros objetos esperando las firmas de Raúl, Guti y especialmente de Roberto Carlos, su ídolo desde niño. Luego iba a llegar el momento clave de la promoción del Real Madrid cuando Raúl hizo el primer lanzamiento del partido, algo que dentro del deporte del béisbol sólo está reservado para los personajes muy especiales y distinguidos en todos los aspectos de la sociedad estadounidense.

Con la misión cumplida en el Wrigley Field, el siguiente acto de promoción de imagen se iba a dar en el Ayuntamiento de Chicago, donde también Raúl, como capitán del equipo, fue el encargado de hacerle entrega al alcalde Richard M. Daley de todos objetos representativos del Real Madrid. Incluida camiseta con el número 005 para conmemorar el año del viaje, un réplica del Santiago Bernabéu y el carné madridista con su nombre. Daley respondió con palabras de agradecimiento y alabanza hacia los jugadores del Real Madrid, un equipo al que calificó de modelo para el mundo.

Después de toda la serie de actos de promoción de la imagen del Real Madrid, por fin llegó la hora de ir al campo del Soldier Field para el primer entrenamiento, y de nuevo lo más destacado fue ver la presencia de más de 3.000 aficionados que fueron a ver en acción a los jugadores del equipo español. De esta manera, los "Galácticos" del Real Madrid cumplían con la última promoción para que cuando comience el partido contra las Chivas, en las gradas del Soldier Field haya una asistencia de entre 50.000 a 60.000 espectadores que habrán tenido que pagar 40 dólares por la entrada más barata o 125 por la más cara.

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