L D (EFE) El partido no tenía muchos alicientes. Al margen de la prácticamente segura victoria de España, estaba la posibilidad de ver en acción al hispano-cubano Iván Pérez que, por primera vez, se medía a la selección de Cuba desde que en 1995 llegara a España y en 1997 se nacionalizara español. Pérez no intervino mucho en el partido. Entró cuando quedaba 2.10 minutos para el final del primer cuarto y marcó en los dos lanzamientos que intentó.
El partido se resolvió en apenas cinco minutos, los que tardó España en conseguir cinco goles. La efectividad de los de Rafael Aguilar resultó inusitada, ya que sus jugadores marcaron seis de los siete lanzamientos que intentaron en los primeros siete minutos. Xavier Vallés, en dos típicas jugadas desde la boya, Ricardo Perrone, en tres tiros desde el arco, y Gaby Hernández dejaron el partido sentenciado en un cuarto en el que Andrade estrenó el marcador cubano cuando la ventaja ya era de 6-1.
Aguilar rotó a su equipo. Buscó motivar a los suyos. Ensayó variantes defensivas, pero pidió sobre todo concentración. Javier García, con tres tantos en el segundo cuarto, fue el más destacado en ese periodo, en el que Javier García e Iván Pérez dejaron el tanteador en 10-2. En la segunda mitad del encuentro, los cubanos bajaron absolutamente los brazos, hasta el punto de que ya no disputaron la posesión del balón en el inicio del cuarto final.
En los últimos catorce minutos, España marcó siete goles más y en ningún momento pareció pensar en lo que se le viene encima, puesto que el encuentro ante Hungría es muy complicado para salvarlo. Hungría es el doble campeón olímpico (Sydney y Atenas) y defiende el título mundial conquistado en Barcelona 20
El partido se resolvió en apenas cinco minutos, los que tardó España en conseguir cinco goles. La efectividad de los de Rafael Aguilar resultó inusitada, ya que sus jugadores marcaron seis de los siete lanzamientos que intentaron en los primeros siete minutos. Xavier Vallés, en dos típicas jugadas desde la boya, Ricardo Perrone, en tres tiros desde el arco, y Gaby Hernández dejaron el partido sentenciado en un cuarto en el que Andrade estrenó el marcador cubano cuando la ventaja ya era de 6-1.
Aguilar rotó a su equipo. Buscó motivar a los suyos. Ensayó variantes defensivas, pero pidió sobre todo concentración. Javier García, con tres tantos en el segundo cuarto, fue el más destacado en ese periodo, en el que Javier García e Iván Pérez dejaron el tanteador en 10-2. En la segunda mitad del encuentro, los cubanos bajaron absolutamente los brazos, hasta el punto de que ya no disputaron la posesión del balón en el inicio del cuarto final.
En los últimos catorce minutos, España marcó siete goles más y en ningún momento pareció pensar en lo que se le viene encima, puesto que el encuentro ante Hungría es muy complicado para salvarlo. Hungría es el doble campeón olímpico (Sydney y Atenas) y defiende el título mundial conquistado en Barcelona 20