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Luxemburgo y el Real Madrid no llegan a un acuerdo para la rescisión del contrato

La rescisión del contrato de Vanderlei Luxemburgo como entrenador del Real Madrid va camino de convertirse en un culebrón. El técnico brasileño, reunido durante casi dos horas con un abogado del club blanco, y con la mediación del Comité Jurisdiccional de Arbitraje y Conciliación de la Federación Española de Fútbol (RFEF), no ha podido llegar a un acuerdo para firmar el finiquito, por lo que ahora se abre un plazo de quince días para que ambas partes presenten alegaciones.

La rescisión del contrato de Vanderlei Luxemburgo como entrenador del Real Madrid va camino de convertirse en un culebrón. El técnico brasileño, reunido durante casi dos horas con un abogado del club blanco, y con la mediación del Comité Jurisdiccional de Arbitraje y Conciliación de la Federación Española de Fútbol (RFEF), no ha podido llegar a un acuerdo para firmar el finiquito, por lo que ahora se abre un plazo de quince días para que ambas partes presenten alegaciones.
L D (EFE) Luxemburgo llegaba a las 17.30 horas a la Ciudad del Fútbol de Las Rozas acompañado por su abogado, Fernando Pérez Espinosa. Mientras, por el Real Madrid, se personaba el abogado Antonio Vázquez y han mediado en el contencioso José Javier Forcén, presidente del Comité Jurisdiccional de Arbitraje y Conciliación de la Federación, además de Alberto Manso y Francisco Rubio, también del citado comité. "No hay acuerdo y ahora se abre plazo para presentar alegaciones por las dos partes hasta el 30 de diciembre. Por tanto, la resolución previsiblemente llegará después de Reyes", declaraba a la salida de la reunión Pérez Espinosa.

El letrado ha explicado los motivos que llevan a que no haya acuerdo entre ambas partes, ya que mientras el Real Madrid ofrece pagar hasta el 31 de diciembre, Luxemburgo quiere cobrar hasta el final de contrato, el 30 de junio de 2006. "Hemos preguntado si tenían alguna propuesta distinta y no era así. Luxemburgo firmó un documento, el primero, con cláusulas por trimestres y después el federativo. Este tiene como garantía que si un entrenador es destituido, el club tiene que pagarle hasta el término del contrato. Por tanto, hay dos cláusulas distintas, pero es normal, porque debes firmar ese federativo para que tramiten la licencia. Es el general, no una excepción para el señor Luxemburgo", relata.

Lo que en ningún caso peligra es la continuidad de Juan Ramón López Caro al frente del banquillo del Real Madrid, como ha confirmado Fernando Pérez Espinosa. Luxemburgo, que llegó al club blanco el 30 de diciembre de 2004, firmó hasta el final de la temporada 2005-06 pero fue destituido por los malos resultados y la mala imagen dada por el equipo el pasado 4 de diciembre. Su sustituto desde entonces es López Caro, que entrenaba al filial.

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