Fuentes del Ministerio de Defensa admitieron que el traslado de los camareros en la aeronave militar fue una "decisión poco acertada", mientras que fuentes del Ejército del Aire indicaron que el Hércules C-130 de la Fuerza Aérea Española no fue fletado para movilizar a los camareros sino que se aprovechó el vuelo, proyectado con otros fines, para desplazar a ese grupo y recalcaron que, en todo caso, ello no supuso "ningún beneficio particular o personal".
Tanto PP, como CiU y Esquerra Republicana criticaron el uso de una aeronave militar para funciones distintas a las contempladas en el ámbito castrense. Concretamente, el portavoz del PP en la Comisión de Defensa del Congreso, Fernando López Amor, dijo que el uso de este tipo de aparatos para desplazar a un grupo de camareros supone, "una vez más", "una confusión clarísima" entre el ámbito privado y el público. Maldonado, por su parte, lo definió como "un craso error" aunque precisó que se trata de una equivocación "imputable" a un determinado nivel.
Por su parte, el portavoz de ERC, Joan Puig aseguró que lo sucedido es "un despropósito" y anunció que su grupo parlamentario presentará próximamente una batería de preguntas para que el Gobierno aclare el asunto en el Congreso de los diputados. "Me parece que es saltarse todas las normas y requisitos que tenían que haberse cumplido", concluyó el diputado republicano.