L D (EFE) Poco pudo hacer Ferrero, decimoquinto preclasificado, ante Kiefer (21) durante los dos primeros sets. La seguridad del alemán y su mejor adaptación a una pista cubierta se hizo notar de inmediato. Por más que el español golpeaba con furia, el frontón Kiefer funcionaba a la perfección. Además, sacaba con un porcentaje de acierto increíble y su resto, anticipándose siempre, inquietaba en exceso al valenciano.
Pese a que en el primer juego del tercer set Ferrero notó problemas con los abdominales, no se entregó y con una ruptura providencial en el duodécimo juego, salvó su honor al ganar este parcial. No obstante poco pudo hacer después. Kiefer estuvo más vivo, más inspirado y sentenció en el cuarto set haciendo inútiles los esfuerzos del español. El alemán será el próximo rival del argentino Juan Ignacio Chela, que se ha impuesto al belga Kristof Vliegen por 6-1, 6-4 y 6-4.
"He estado patética", decía por su parte María Antonia Sánchez Lorenzo para calificar su derrota ante Schiavone, decimoquinta cabeza de serie. Hasta este sábado la salmantina nunca había perdido un partido con este marcador y ante una rival con la que tenía aspiraciones. La había vencido ya en dos ocasiones, en 2000 en un ITF disputado en Potiers (Francia) y, más recientemente, en Gold Coast (Australia) en 2004.
El encuentro estaba previsto que se disputase en la pista Margaret Court, una exterior del recinto de Melbourne Park, pero una vez que la organización decidió aplicar la regla ante el calor extremo debido a las altas temperaturas, fue trasladado al Rod Laver Arena y se disputó bajo techo.
Ese cambio alegró en principio a María Antonia, que se salvaba de un sol abrasador y pasaba a un recinto con aire acondicionado. Pero una vez dentro de la pista, la española no fue capaz de acostumbrarse. "No he tenido ningún problema físico, me he encontrado muy mal pues la sensación de jugar bajo techo es como si no pudiera mover la bola, me pesaba mucho, ha sido un día un poquito pésimo", decía la española, que cometió 23 errores no forzados y que sólo fue capaz de conectar cinco golpes ganadores.