LD (EFE) La borrasca de este fin de semana han dejado nieve en zonas muy extensas pero ya se ha transformado desde primeras horas de este lunes en vientos y lluvias fuertes que han afectado al litoral levantino, Baleares y a Cataluña, donde 5.000 alumnos que no han podido asistir a clase, en especial en las comarcas de Lérida y en las de Tierras del Ebro. Como apuntes extremos de este temporal, Miró destacó el medio metro de nieve en Sort (Lérida), la mínima de Albacete, menos 15 grados, o los 42 litros de agua caídos en Estepona (Málaga).
Protección Civil mantiene la alerta por nieve en Aragón, donde además está activado el aviso por riesgo máximo (5) de aludes, en Cataluña, Andalucía y Castilla-La Mancha. En Cataluña además está activada la alerta por lluvias, con precipitaciones de 80 litros por metro cuadrado, al igual que en Baleares, donde se estiman 60 litros por metro cuadrado. Esas dos comunidades están además avisadas ante la predicción de rachas de viento, que en Cataluña serán de 80 kilómetros por hora, y en Baleares de 90 kilómetros por hora.
Protección Civil aseguró que "la colaboración ciudadana y los medios de comunicación" han facilitado que el dispositivo habilitado para hacer frente al temporal durante el fin de semana haya funcionado "razonablemente bien" y les agradece que hayan seguido sus "avisos y recomendaciones". Sin embargo, en Monesterio y Fuente de Cantos (Badajoz), cerca de 800 personas pasaron la noche en sus vehículos, dependencias municipales u hoteles, asistidos por la Guardia Civil y Cruz Roja, debido a que la N-630, en el llamado "cruce de la muerte", tuvo que cortarse por la nieve y las placas de hielo. A primera hora de la mañana, se daba paso de manera lenta a los turismos provistos de cadenas, por lo que unas 600 personas habían podido retomar su camino.
Algunos de los que quedaron atrapados en Monesterio fueron los jugadores de el Extremadura, que pasaron la noche en el autobús que les traía de regreso desde Ceuta. Además, un centenar de camiones bloqueaban, atrapados por la nieve, el acceso hasta Monesterio y Fuente de Cantos, aunque sobre las 04.30 fueron desalojados con ayuda de las quitanieves. En la sierra de Huelva, 172 personas se quedaron atrapadas y tuvieron que pasar la noche alojadas en diferentes localidades, una zona en la que además se interrumpió el suministro eléctrico.
Las alrededor de cuarenta personas que quedaron atrapadas por la nieve y el hielo en el complejo rural municipal de Peña Escrita de Almuñécar (Granada) este fin de semana pudieron abandonarlo al mediodía tras ser retirada la nieve. Aunque a primera hora de la mañana había cuatro carreteras de la red principal cortadas y en otras cuatro se necesitaban cadenas, hacia las siete de la tarde la situación había mejorado y sólo eran la N-141A en Igualada (Barcelona) y la N-260 en Montagut (Girona), y el puerto de Torre Miro, en Castellón.
Entre las cortadas por la mañana destacaba la N-435 a su paso por la localidad de Jerez de los Caballeros, en Badajoz, donde no nevaba desde hacía 25 años y a diez kilómetros de esa localidad, los 469 habitantes de Valle de Matamoros, están aislados por carretera desde las siete de la tarde de ayer. El mal estado de la mar ha provocado que la compañía naviera Balearia haya anulado la salida de su buque "Ramon Llull" desde el puerto mallorquín de Alcudia al menorquín de Ciudadela.
Protección Civil mantiene la alerta por nieve en Aragón, donde además está activado el aviso por riesgo máximo (5) de aludes, en Cataluña, Andalucía y Castilla-La Mancha. En Cataluña además está activada la alerta por lluvias, con precipitaciones de 80 litros por metro cuadrado, al igual que en Baleares, donde se estiman 60 litros por metro cuadrado. Esas dos comunidades están además avisadas ante la predicción de rachas de viento, que en Cataluña serán de 80 kilómetros por hora, y en Baleares de 90 kilómetros por hora.
Protección Civil aseguró que "la colaboración ciudadana y los medios de comunicación" han facilitado que el dispositivo habilitado para hacer frente al temporal durante el fin de semana haya funcionado "razonablemente bien" y les agradece que hayan seguido sus "avisos y recomendaciones". Sin embargo, en Monesterio y Fuente de Cantos (Badajoz), cerca de 800 personas pasaron la noche en sus vehículos, dependencias municipales u hoteles, asistidos por la Guardia Civil y Cruz Roja, debido a que la N-630, en el llamado "cruce de la muerte", tuvo que cortarse por la nieve y las placas de hielo. A primera hora de la mañana, se daba paso de manera lenta a los turismos provistos de cadenas, por lo que unas 600 personas habían podido retomar su camino.
Algunos de los que quedaron atrapados en Monesterio fueron los jugadores de el Extremadura, que pasaron la noche en el autobús que les traía de regreso desde Ceuta. Además, un centenar de camiones bloqueaban, atrapados por la nieve, el acceso hasta Monesterio y Fuente de Cantos, aunque sobre las 04.30 fueron desalojados con ayuda de las quitanieves. En la sierra de Huelva, 172 personas se quedaron atrapadas y tuvieron que pasar la noche alojadas en diferentes localidades, una zona en la que además se interrumpió el suministro eléctrico.
Las alrededor de cuarenta personas que quedaron atrapadas por la nieve y el hielo en el complejo rural municipal de Peña Escrita de Almuñécar (Granada) este fin de semana pudieron abandonarlo al mediodía tras ser retirada la nieve. Aunque a primera hora de la mañana había cuatro carreteras de la red principal cortadas y en otras cuatro se necesitaban cadenas, hacia las siete de la tarde la situación había mejorado y sólo eran la N-141A en Igualada (Barcelona) y la N-260 en Montagut (Girona), y el puerto de Torre Miro, en Castellón.
Entre las cortadas por la mañana destacaba la N-435 a su paso por la localidad de Jerez de los Caballeros, en Badajoz, donde no nevaba desde hacía 25 años y a diez kilómetros de esa localidad, los 469 habitantes de Valle de Matamoros, están aislados por carretera desde las siete de la tarde de ayer. El mal estado de la mar ha provocado que la compañía naviera Balearia haya anulado la salida de su buque "Ramon Llull" desde el puerto mallorquín de Alcudia al menorquín de Ciudadela.