L D (EFE) El equipo dirigido por Sergio Valdeolmillos empezó muy fuerte el partido y marcó el ritmo desde el principio, con Curtis como principal baza ofensiva. El CB Granada trató de cargar el juego en la pintura, y ahí se fraguó la primera diferencia de puntos en el marcador. A pesar de todo, el Pamesa encontró en el talento de Timinskas y Dikoudis la forma de recuperarse para poner la igualada al final de los primeros 10 minutos.
En el segundo cuarto apretó Granada, con una gran defensa y un dominio bajo los tableros, para llegar al final de la manga con cinco puntos de diferencia (28-23). En la segunda parte siempre fue por delante el conjunto granadino aunque aun con escasa renta, pero un parcial en esta fase de 21-15 determinó el desarrollo posterior del encuentro.
En el último y definitivo cuarto, el cuadro local infirió buscó siempre a un acertado y omnipresente Borchardt y el Pamesa terminó confundido y a merced de su rival. Con al derrota al Pamesa se le complica la participación entre los ocho mejores, mientras que el CB Granada toma aire y consigue así la tercera victoria en lo que va de la segunda vuelta.
El Llanera superó este contratiempo a fuerza de carácter y precisión en las posesiones que marcaron el desenlace final del encuentro. Lo mejor de la tarde para los locales ocurrió en el segundo cuarto, lapso que registró la mayor ventaja del choque tras un triple de Alberto Miguel (38-27). El escolta y su compañero Nacho Yáñez sostuvieron al Menorca en medio de un ambiente de gran tensión ambiental que el estadounidense Bud Eley olvidó para fajarse en las zonas.